El sindicato Unións Agrarias (UUAA) cifró ayer en 14,5 millones de euros los daños producidos en las explotaciones de viñedos por la granizada del domingo y reclamó a la Xunta ayudas directas a los afectados para solventar una situación económica "muy delicada". Recordó que el año pasado habilitó una partida de medio millón de euros para paliar los daños sufridos por los viticultores.

El responsable de ganadería y agricultura del sindicato, José Ramón González, reiteró la petición de que se declare zona de "emergencia" las zonas afectadas, después de que los alcaldes de la comarca de O Ribeiro reclamasen también considerarlas zona catastrófica.

Con respecto al sur de Lugo y la montaña de Ourense, denunció que los ganaderos y apicultores necesitan medios "de manera urgente" porque "no tienen qué darles de comer y de beber" a los animales. Como medida de presión, anunció el bloqueo de las oficinas comarcales hasta que la Consellería de Medio Rural ofrezca una solución.

La conselleira del ramo, Ángeles Vázquez, vinculó la declaración de zona catrastrófica en O Ribeiro a los estudios que está realizando su departamento, si bien matizó que sufrió daños por el granizo una zona "muy concreta y centralizada".

Reconoció el "mal año" para los viticultores de la comarca, pero añadió que en las Rías Baixas y la Ribeira Sacra las cosechas serán "espectaculares" .