La Consellería de Infraestructuras remitió ayer a las empresas de transporte una circular, instándolas a informar a los usuarios de los horarios y paradas de las nuevas rutas de transporte, después de las numerosas incendencias registradas el martes en el estreno del plan de transporte, con más de 750 líneas.
En el segundo día de la puesta en marcha de las nuevas concesiones, persistieron los problemas. Para la Xunta son "incidencias puntuales y lógicas porque todos los cambios requieren de un periodo de adaptación".
Los usuarios del transporte público por carretera se quejan de no saber dónde para su bus o a qué hora deben ir a la parada. Y por ello, el Gobierno autonómico recordó por escrito a las concesionarias que el contrato les obliga a "editar y divulgar material de información" con las paradas y horarios de las líneas de autobus, como por ejemplo folletos y carteles, que además deben incluir un número de teléfono al que los consumidores puedan llamar para despejar sus dudas y obtener información.
El desconocimiento de los nuevos horarios y paradas no es el único problema para los usuarios de las líneas de buses. Y es que hay casos en que las nuevas líneas les dificulta la comunicación con otros concellos. Es el caso de Pobra de Trives, en Ourense. El propio concello denunció ayer que si los vecinos tiene que ir al hospital, la Agencia Tributaria o Seguridad Social, que abren por las mañana, y están en O Barco, deben irse el día anterior en el bus, que sale a las cuatro y media de la tarde, y no podrán volver hasta las 5.15 de la madrugada del día después. "Es un horario inútil". "Precisamos tres días para llegar en transporte público a un concello que está a 40 km de distancia", se quejaba el alcalde Francisco José Fernández.
Un grupo de 15 trabajadores de la Universidad de Vigo que se desplazan a diario desde Ourense se quejan porque el nuevo bus saldría hora y media más tarde para regresar a la ciudad de las Burgas, por lo que no llegan a casa hasta media tarde.
La reducción de frecuencias, la supresión de paradas y rutas "imposibles" en Moaña y Cangas también molestan a los vecinos de ambas localidades. Se quejan de que en la ruta Cangas-Moaña-Vigo se han elminado "numerosas paradas" y en otras rutas se pasa por lugares de difícil acceso para un autobús. Vecinos de Cangas, de los lugares de Madalena, Portela y A Graña, muestran su malestar porque tienen que bajar hasta Cangas para luego ir a Pontevedra, cuando antes el bus pasaba por su zona.
La conselleira de Infraestructuras, Ethel Vázquez, subrayó ayer que el nuevo plan de transporte tendrá éxito si Xunta, concellos y empresas trabajan juntas "para resolver las incidencias". Tampoco descartó "hacer aquellas adaptación que supongan un mejor servicio".
