Ahora que el Gobierno presume de que la crisis ya es historia y que se han recuperado los niveles de riqueza previos, uno de los colectivos perjudicados por los recortes que de ella se derivaron, el de los facultativos, retoma con fuerza sus reivindicaciones salariales. Una de ellas es el reconocimiento de la carrera profesional. El Colegio Oficial de Médicos de Pontevedra estudia la posibilidad de presentar una reclamación colectiva ante Europa. Recuerda que este complemento está recogido en dos leyes estatales, así como en la Lei de Saúde de Galicia, y destaca que la gallega es la única comunidad que no lo tiene implantado o no lo está negociando.

¿Qué es la carrera profesional? Es un sistema de reconocimiento del desarrollo profesional en base tanto a la antigüedad, como a los méritos logrados o las competencias adquiridas. Esto incluiría desde su implicación para alcanzar los objetivos asistenciales establecidos por el centro y Sanidade en los acuerdos de gestión anuales, hasta la actualización de su conocimiento científico o el desarrollo de proyectos de investigación, entre otros.

El presidente del colegio de médicos de Pontevedra, Luis Campos Villarino, explica que se articularía en torno a baremos claramente especificados que, entiende, deberían establecer entre la Administración, los colegios profesionales y las sociedades científicas. Subraya que esto entronca con la "recertificación profesional que la Unión Europea está reclamando para los sanitarios".

La carrera cuenta con cuatro grados y alcanzar cada uno de ellos supone alrededor de 3.000 euros brutos anuales de complemento -12.000 si se logran los cuatro-, según lo fijado en 2005. Porque en Galicia ya se había iniciado la implantación de este reconocimiento. De 2005 a 2009 funcionó el llamado "tramo extraordinario" para la incorporación del personal a este sistema de gratificaciones, principalmente, en base a los años trabajados y con unos requisitos básicos de objetivos. El desarrollo de su funcionamiento "ordinario" estaba previsto para 2009, pero se paralizó por la crisis.

El doctor Campos resalta que ya se ha retomado en todas las comunidades -por lo menos su negociación- menos en Galicia. Considera que esto pone a los facultativos gallegos en una situación de desventaja con respecto a profesionales con las mismas competencias que lleguen al Sergas con el reconocimiento otorgado en otra comunidad y que se le mantendría. En este sentido, el prestigioso bufete madrileño en manos del que han puesto elcaso, ve en la directiva comunitaria 36/2005 de libre circulación de profesionales la vía para interponer la reclamación colectiva que el colegio planea junto a la Asociación de Facultativos Especialistas de Área de Galicia -con 735 socios- y apoyados por el Consello de Colexios Médicos de Galicia. "Estamos viendo cómo se articularía, ante quién y el coste ", explica el doctor.

Cambio de la Lei de Saúde

Por otra parte, la junta del colegio médico pontevedrés ha convocado para el lunes una comisión urgente para analizar la modificación de la Lei de Saúde que el Sergas presentó ayer y que plantea la reordenación del mapa sanitario. A la espera de consensuar en qué sentido irán las alegaciones del colectivo que preside, el doctor Campos Villarino avanza que reclamarán a Sanidade que explique de forma pormenorizada en qué puede consistir esa reorganización. "Dice que las áreas se fijarán según las condiciones geográficas, demográficas, epidemiológicas y de accesibilidad, así como por las necesidades de la población. Nos preocupa que se produzca una modificación con redistribución de población o que afecte a carteras de servicios", expone.

A lo que directamente muestran sus rechazo es a la provisión de plazas por libre designación. "Los nombramientos deben ser por concurso u oposición", defiende.