Los mensajes ofrecidos por el ministro de Fomento y el presidente de la Xunta sobre la variante de Cerdedo no se ajustaron a las demandas del alcalde de Vigo, Abel Caballero, que no solo exigió ayer concreción, sino que prometió que el enlace directo por ferrocarril entre Vigo y Madrid, pasando por Ourense, será realidad. "No quieren hacerlo y se pongan como se pongan lo van a hacer, ya se lo adelanto", declaró ayer.

De hecho, lamentó la falta de un cronograma claro sobre esa infraestructura y trasladó "clarito clarito" a De la Serna -al que afeó no visitar Vigo- y a Feijóo "que no habrá AVE de Galicia a Madrid en tanto no sea desde Vigo a Madrid". "Será el AVE de una parte de Galicia, pero no el AVE de Galicia, que requiere ineludiblemente que cubra también Vigo-Madrid", expuso en relación al plazo de finales de 2019 como inicio de la circulación en pruebas en esa línea.

El regidor anticipó protestas a partir del mes que viene si no percibe avances en la tramitación de la declaración de impacto ambiental de la variante. "Si no, en septiembre empezaremos", anunció, sobre unas acciones con "más contundencia" que el concierto de la coral Casablanca, comparó.

Finalmente, advirtió al PP del peaje de su postura. "Van a tener un inmenso castigo político y a mí no me consuela. Yo quiero el AVE de Vigo a Madrid y lo va a haber; vamos a tener tren de alta velocidad por las buenas o las malas, lo vamos a tener y ya, pero a lo mejor con un inmenso castigo al PP", finalizó.