Las tres principales federaciones de autobuses de Galicia auguran peleas judiciales de las empresas de transporte escolar contra la Xunta por la rescisión de su contrato tras integrarse estas rutas con las líneas regulares de viajeros. Según explica la patronal, estas concesiones estaban garantizadas hasta el año 2020 pero el nuevo mapa de transporte público de la Xunta priva ahora a las compañías de estos servicios.

Esto afectará a la totalidad de las empresas de transporte de Ourense, al 80 por ciento de las de Lugo, al 20 por ciento de las de Pontevedra y al 10 por ciento de las de A Coruña, que venían prestando servicio de transporte escolar.

Anetra, Fegabús y Transgacar, las tres principales federaciones del transporte de viajeros en autobús, tildan de “despropósito” el plan de la Consellería de Infraestruturas y advierten que aboca al cierre de las pequeñas empresas del rural. Según denuncian, la Xunta “hace una valoración leonina e irreal” de los costes que supondrá la prestación de los servicios de transporte de viajeros. “Lo que ellos calculan supondrá un déficit del 40 por ciento”, explica Carlos García Cumplido, presidente de Fegabús.

Por esta razón, advierten que los nuevos contratos están diseñados para grandes compañías y aseguran que las actuales empresas no podrán optar a ellos porque no les resultará rentable.

“El proyecto provocará la pérdida de un gran número de puestos de trabajo y la precarización de las condiciones laborales”, advierten.

Pero además alertan que el nuevo modelo conlleva a la desaparición del transporte escolar. “No se trata del TES+BUS, en el que suben unos pocos pasajeros a autobuses escolares”, advierten. Según denuncian, quieren aprovechar las líneas regulares e incorporar a los niños. “Los alumnos tendrán una reserva de plazas en cada vehículo, pero sin más beneficios más allá del acompañante”, aclaran.