Por primera vez en España, el pasado año los laboratorios adscritos a Farmaindustria publicaron los pagos realizados a profesionales sanitarios para sufragar su presencia en congresos, reuniones y cursos científicos. Según la información de la patronal,las farmacéuticas españolas destinaron un total de 119 millones de euros a asumir los gastos del desplazamiento, alojamiento y manutención de médicos en actividades de formación.

En Galicia, solo 600 de los 12.000 médicos en activo autorizaron a Farmaindustria a revelar los importes recibidos para asistir a jornadas científicas,realizar labores de consultoría o participar como ponentes en los eventos. Entre quienes dieron su consentimiento, la cantidad media de los pagos recibidos es de unos 800 euros al año.

GlaxoSmithKline (GSK), Novartis y MSD, son las farmacéuticas que han financiado la asistencia a congresos de la mayor cantidad de facultativos gallegos.Unos 274 percibieron cantidades de la primera compañía, dueña del Ventolín; al menos 150 de la segunda, titular de Sintrom; y medio centenar de la tercera, que ha desarrollado uno de los últimos fármacos contra la hepatitis C.

Jesús Sueiro, presidente de la Asociación Galega de Medicina Familiar e Comunitaria, que acude a varios congresos cada año asegura que es una situación "atípica" respecto a la sanidad pública de "la mayoría de los países", en los que, señala, la formación profesional corre a cargo de la Administración y no del sector privado. La ausencia de inversión pública para este fin en España, junto con los salarios de los médicos explica, según Sueiro, que estos recurran a pagos de la industria para acudir a congresos y poder seguir formándose: "El gran secreto del sistema sanitario español es que es tan sostenible por las bajas retribuciones de los profesionales", sostiene.