La asociación de consumidores Facua ha logrado que se imponga a Volkswagen la primera multa en Galicia por el fraude de sus motores diesel, el conocido comodieselgate. La cuantía asciende a 33.800 euros tras la denuncia de la propietaria de un Golf en Ourense que adquirió el vehículo hace seis años de segunda mano.

En cartera todavía restan 4.174 denuncias presentadas por los socios de Facua ante las autoridades autonómicas de consumo, a las que se unen casi 7.000 propietarios de vehículos afectados en la causa penal abierta en la Audiencia Nacional por el caso, según informó Facua.

El escándalo “diesel gate” estalló en septiembre de 2015, cuando la agencia de Estados Unidos encargada de la protección del medio ambiente denunció a la compañía alemana por haber instalado un software que detectaba cuándo eran sometidos a inspección los vehículos y encendía un sistema de control de emisiones para ajustarse a la normativa que se desactivaba cuando concluía el examen. Las autoridades acusaron al grupo de vender motores que emitían en modo normal 40 veces más contaminantes -óxido de nitrógeno- de lo permitido.

Según los cálculos que trascendieron entonces, ese programa informático operaba en 11 millones de vehículos, de los que alrededor de 700.000 se habían comprado en España. El impacto del escándalo le costó el puesto al consejero delegado del grupo, Martin Winternkorn, y la compañía se ofreció a reparar los vehículos de los afectados, entre los que se encuentran modelos como el Audi A3, el Golf o el Tiguan, pero no a indemnizarlos.

En Galicia las consecuencias del caso se notaron en la sede del Instituto Galego de Consumo, que el año pasado abrió propuestas de sanción por 9,4 millones de euros vinculadas exclusivamente con el “diesel gate”. Ello provocó que los expedientes vinculados al sector de la automoción rozasen los 21 millones el año pasado, el triple que en 2015.

El caso de Facua está relacionado precisamente con la Consellería de Economía, que considera una "infracción grave en materia de defensa del consumidor", según la asociación, para imponer la citada sanción. Facua presentó ante el IGC, dependiente de la Xunta, 225 de sus denuncias.

Hasta la fecha, el IGC es la única autoridad autonómica de protección al consumidor que ha dado a conocer la apertura de expedientes sancionadores a las filiales del grupo Volkswagen como consecuencia de las denuncias interpuestas individualmente por los afectados por el fraude en la manipulación de los motores diésel.