El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, garantizó esta mañana en el Parlamento que no renunciará al traspaso de la AP-9 a Galicia, a pesar de que el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, se niega a transferir la titularidad de esta autopista. "Entre cumplir mi programa electoral o seguir los dictados de mi partido, cumpliré mi programa electoral", sentenció en respuesta a una pregunta del portavoz socialista, Xoaquín Fernández Leiceaga.

Frente a las críticas de PSOE y En Marea que criticaron su falta de peso político en Madrid, Feijóo reivindicó que su Gobierno fue el único que solicitó la transferencia de la Autopista del Atlántico y defendió el acuerdo alcanzado con Fomento para que el Ejecutivo central asumiera el 50 por ciento del coste de las bonificaciones de los peajes de Rande y Barcala. "Los gallegos tendrán que pagar 180 millones de euros menos", destacó. Y, por el contrario, recordó que el PSdeG y el BNG habían votado en contra de la transferencia de la AP-9 propuesta por el PPdeG cuando gobernaba el bipartito.

Leiceaga le recriminó además el recorte de inversiones para Galicia en los presupuestos del Estado para este año. "Llevan cinco años dejando de ejecutar el 40 por ciento de los fondos del AVE: 2.200 millones de euros", lamentó el socialista que reclamó más partidas para la comunidad autónoma para adelantar la llegada de la alta velocidad a Galicia. "Y no me diga que no hay dinero porque sí lo hay para el País Vasco", aseguró en alusión al acuerdo alcanzado con el PNV a nivel estatal para aprobar las cuentas de 2017.

"Si los seis diputados del PSdeG en el Congreso se comprometen a pactar los presupuestos del Estado, yo me comprometo a cambia el PNV por el PSdeG", retó Feijó.

En Marea y el BNG reclamaron a Feijóo que no ceda al "chantaje" del empresario Juan Miguel Villar Mir de segregar las plantas de Ferroatlántica en la Costa da Morte. Especialmente duro se mostró el portavoz parlamentario de la izquierda rupturista, Luís Villares, quien mostró un papel del Boletín del Registro Mercantil con la inscripción de la empresa segregada. "La empresa ya da por hecho que la Xunta va a aceptar su petición porque ya los compraron con 700.000 euro de financiación ilegal a su partido", asegur Villares en alusión a la Operación Lezo, donde Villar Mir está siendo investigado.

Feijóo explicó que ya tienen el expediente para la segregación de Ferroatlántica desde hace cuatro días y que ahora estudiarán si se ajusta a la ley y, si es el caso, reclamarán "garantías iguales o mayores" de empleo que las actuales. "Seré el garante de la ley y del empleo", prometió Feijóo en presencia del comité de empresa y de los trabajadores de la empresa que vieron el debate parlamentario desde la tribuna.