Nadie discute la inmensa capacidad de la industria alimentaria gallega. Entre otras cosas, por la calidad de la materia prima. Pero la asignatura pendiente hasta ahora era sacarle todo el partido posible en su transformación elevar el valor añadido, como destaca Roberto Alonso, gerente de Clúster Alimentario de Galicia (Clusaga), y aprovechar los avances tecnológicos y la cooperación entre las compañías para optimizar procesos y ganar competitividad. Esa es la finalidad del concurso de ideas Industria 4.0. del Instituto Galego de Promoción Económica, en el que en su primera edición de 2016 participan las queseras Innolact, la vinícola Martín Códax y Kiwi Atlántico. Clusaga prepara la presentación de más empresas a la segunda edición del programa de la Xunta que busca la innovación en la industria, esta vez con un presupuesto de cuatro millones de euros. Lo hará a través de un consorcio integrado por ocho empresas.
