El caos generado en los accesos fronterizos entre Galicia y Portugal a raíz de la visita del Papa Francisco a Fátima fue motivo de crítica por parte del presidente de la Xunta, Álberto Núñez Feijóo, que mostró su "sorpresa" por las restricciones a la circulación en estos pasos limítrofes y censuró que no se hayan trasladado "con la suficiente agilidad e intensidad". "No se hizo con la antelación suficiente", aseguró, aunque sin mencionar si la responsabilidad fue del Gobierno luso, del español o de ambos.

"Entiendo la contrariedad de estas personas que se vieron sorprendidos por las medidas adoptadas", explicó tras el Consello de la Xunta.

El titular del Gobierno gallego también se refirió al rechazo de Podemos en el Senado a una iniciativa que reclamaba que el AVE gallego se terminara en 2019. "No es la primera vez que escuchamos que la alta velocidad gallega no es prioritaria, lo dijo Ciudadanos, UPyD, los nacionalistas catalanes... y ahora Podemos se suma a la nómina", lamentó. En su opinión, lo que tienen en común todos estos partidos es que "ni conocen Galicia ni les interesa".Y se mostró especialmente molesto con el hecho de que fuera una senadora gallega de Podemos la que defendiese el voto negativo. "Antepone los intereses de Pablo Iglesias a los de la comunidad gallega", criticó.