El Parlamento aprobó ayer por unanimidad solicitar al Gobierno que negocie convenios con otros países por los que se reconozca la pensión de invalidez de emigrantes retornados, aunque la mayoría del PP tumbó la petición del BNG de pedir que se anulen las reclamaciones a quienes no tributaron y se fije un umbral de exención. Los populares alegaron que así se discriminaría a quienes sí cumplieron con el fisco mientras cientos de personas de colectivos afectados se manifestaban en Santiago y pedían un límite de exención de 22.000 euros y no de 12.000, "como el resto de pensionistas".