El PSdeG perdió ayer la alcaldía del ayuntamiento de Sobrado (A Coruña) después de que los tres concejales del PP y los dos ediles independientes de Todos por Sobrado aprobaran con sus votos la moción de censura que buscaba desalojar del consistorio al hasta entonces regidor Lisardo Santos, quien gobernaba el municipio en minoría.
La nueva alcaldesa, María Jesús Souto, que ejercía como portavoz de Todos por Sobrado, accedió al bastón de mando pese a que su formación es la que cuenta con menos representación en la corporación municipal.
Según Souto, el acuerdo de su agrupación con el PP -que en 2015 apoyó la investidura del ahora exregidor Santos- se produjo como consecuencia de incumplimientos en la actividad municipal: "No se facilitaba documentación ni se cumplían acuerdos plenarios".
Por su parte, el exalcalde del PSdeG, que fue el partido más votado en las elecciones municipales de 2015, denunció la existencia de "intereses ocultos" tras el pacto, al que atribuyó la intención de romper con "la voluntad democrática expresada en las urnas".
Acompañado por la regidora de Bergondo y los alcaldes de Betanzos y Mesía, entre otros representantes municipales coruñeses del PSdeG, Santos reiteró que la moción quería "usurpar" a su partido la dirección del Concello e instó a la nueva alcaldesa a celebrar con su grupo la primera reunión de trabajo de su equipo de gobierno.
En ese sentido, la cabeza de lista de Todos por Sobrado aseguró haber "tendido la mano" a la agrupación socialista para que exista colaboración entre las distintas fuerzas políticas en la nueva legislatura: "Ahora somos dos equipos y espero que también se integre el grupo socialista".
En cuanto a cómo se va a realizar el reparto de competencias entre su formación y el PP, Souto afirmó que aún no se concretó nada, aunque afirmó que, en su caso, espera poder compatibilizar su cargo con su actividad profesional.
