Oposiciones sí, pero solo si hay "seguridad jurídica". El conselleiro de Educación, Román Rodríguez, defendió esta mañana en Santiago la postura hasta ahora inamovible de la Xunta con respecto a la oferta pública de empleo, cuyo futuro está en el aire hasta que se aprueben los presupuestos del Estado. Así sigue siendo para Galicia, donde la Consellería de Educación no está dispuesta, afirma, a que los opositores puedan tener "con posterioridad cualquier tipo de problemática".

Después de que Asturias se echase también atrás en la convocatoria, Román Rodríguez aseguró que la Xunta mantiene su "hoja de ruta", que es la de convocar oposiciones "con seguridad jurídica". Justo porque no la hay, alega, la comunidad vecina ha dado marcha atrás. Según añadió, "queda margen temporal para tomar una decisión definitiva" que, en el caso del Ejecutivo gallego, partirá siempre de dos premisas: esa seguridad jurídica y la "voluntad" de la Administración autonómica de convocar oposiciones, "en función de cómo evolucione la cuestión jurídica en el ámbito estatal". "Nos consta que se está trabajando en esa línea", proclama.

Los sindicatos no lo ven de la misma manera. Tanto CIG Ensino como STEG reclamaron esta misma mañana que las oposiciones de la enseñanza se convoquen ya. STEG, en un comunicado que titula irónicamente como "las oposiciones de Schrödinger", exige a la Consellería que convoque oposiciones "sí o sí". "No hay otra opción, ya que deberían haber sido previstas en los calendarios anuales como se vino haciendo hasta ahora", argumentan.

Para STEG la "falta de respeto" con la que se trata a los opositores queda "ampliamente demostrada" por la Xunta, que, apunta, "ni toma en cuenta el esfuerzo y el dinero invertidos en la preparación de las mismas ni tampoco toma en serio el fortalecimiento de un sistema educativo público tan mermado y boicoteado". "Que no nos engañen", proclaman, "queremos oposiciones y queremos un número de plazas reales y necesarias, no ridículas ofertas hechas de manera populista", añaden en su nota.

Por su parte, desde CIG Ensino también exigieron la convocatoria inmediata de oposiciones del profesorado y lo hizo gráficamente, a través de una concentración en San Caetano, ante la sede de la Xunta. Supeditar la convocatoria a la aprobación de los presupuestos generales del Estado "convierte a la educación en moneda de cambio", afirman. "Entendemos que no hay ningún impedimento legal, ya que los presupuestos de 2016 están prorrogados", explicó Anxo Louzao, secretario xeral del sindicato, quien además añadió que en comunidades como Euskadi han decidido seguir adelante.