La siniestralidad viaria ha descendido en el 57,1 por ciento en Galicia, al pasar de 14 accidentes de tráfico en febrero de 2016 a seis el mes pasado, periodo que se cerró con ocho fallecidos frente a los 15 del año anterior, el 46,7% menos.

Así lo reflejan los datos difundidos este miércoles por la Dirección General de Tráfico (DGT), recogidos por Europa Press, de los que se desprenden que el mayor descenso de víctimas ha correspondido a la provincia de Lugo, al bajar de cinco en febrero de 2016 a una el mes pasado (-80%); seguida de Pontevedra, de tres a dos (-33,3%); y A Coruña, de siete a cinco (-28,6%). Por su parte la de Ourense se mantuvo sin fallecidos.

En cuanto al número de accidentes, la mayor reducción se ha registrado en la provincia de Lugo, de cuatro siniestros en febrero de 2016 a uno el mes pasado (-75%); seguida de A Coruña, de siete a tres (-57,1) y Pontevedra, de tres a dos (-33,3%). Mientras, en Ourense no hubo accidentes mortales.

En cuanto al tipo de accidentes, según los datos de la DGT, cuatro de ellos fueron salidas de vía, mientras que otro correspondió a una colisión y un atropello.

De las ocho víctimas mortales registradas el mes pasado en la red viaria de Galicia, tres eran mayores de 65 años; otras tres tenían entre 25 y 35 años; una se situaba entre los 36 y 45 y otra era menor de 25.

Lo que va de año

En lo que va de año, hasta el final de febrero, según las cifras de la Dirección General de Tráfico, han fallecido 15 personas en 13 accidentes de circulación, frente a los 18 muertos en 17 siniestros en el mismo periodo de 2016.

Esto supone una reducción del 16,7 por ciento en el número de personas fallecidas en las carreteras gallegas y una caída del 23,5 por ciento en la cifra de siniestros de tráfico.

En la provincia de Lugo se ha pasado de siete fallecidos a tres (-57,1%) y de seis a tres siniestros (-50%) y en la de A Coruña de ocho a siete muertos (-12,5%) y de ocho a cinco accidentes (-37,5%).

En la provincia de Ourense, por su lado, el número de accidentes y víctimas pasó de ninguna en los dos primeros meses de 2016 a uno en cada caso en 2017.