El invierno gallego está de regreso tras tres meses de larga sequía y la previsión es que se instale en la comunidad autónoma al menos durante diez días. Por esa razón, aunque se mantiene de momento la situación de prealerta, la Xunta se muestra "optimista" con el fin de la sequía y la recuperación del caudal de los ríos.

Las primeras lluvias reaparecieron el miércoles por la noche en la franja atlántica y se fueron extendiendo durante el día de hoy por toda la comunidad autónoma. Aunque estas precipitaciones no dejaron mucha agua -donde más llovió fue en el Barbanza con 36 litros por metro cuadrado mientras que en Vigo cayeron solo dos litros por metro cuadrado-, el meteorólogo Juan Taboada, de Meteogalicia, explica que lo importante es que "se ha derribado la barrera anticiclónica dando paso en los próximos días a una sucesión de borrascas y frentes". Es decir, se recupera el tiempo húmedo y lluvioso propio de los inviernos gallegos.

Desde la Consellería de Medio Ambiente aclaran que estas primeras precipitaciones del día de ayer todavía no han permitido aumentar el volumen de agua embalsada ni el cauce de los ríos, puesto que la tierra está seca después de tres meses sin llover y las primeras gotas de lluvia se absorben rápidamente. Tal y como explican desde Augas de Galicia, es necesario que llueva "con cierta intensidad" para que se recuperan los niveles hídricos de la comunidad autónoma, pero lo más importante es que las precipitaciones sean "continuas" en el tiempo. Y eso es lo que aventuran las previsiones meteorológicas.

Meteogalicia apunta a que durante los próximos diez días predominará el tiempo lluvioso, aunque Juan Taboada aclara que no pueden todavía determinar cúal será la intensidad de las precipitaciones que traerán consigo las borrascas y frentes que cruzarán Galicia.

En cualquier caso, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, enfatizó ayer que las previsiones meteorológicas son "optimistas" puesto que se "albergan esperanzas de lluvia" para los próximos días. Según explicó, los embalses se encuentran "en valores semejantes a los últimos cinco años" y el abastecimiento está asegurado, a pesar de lo cual mantendrán, de momento, el nivel de prealerta. Las presas se encuentra al 69 por ciento de su capacidad, solo tres puntos por debajo de la ocupación que registraban el año pasado por las mismas fechas.

Augas de Galicia estima que los embalses de abastecimiento podrían recuperar sus niveles máximos "con unas pocas semanas de lluvia".

Para que los ríos vuelvan a su caudal habitual hará falta, sin embargo, más tiempo. Desde la Xunta creen que haría falta que lloviese durante los próximos tres meses para que se recupere su nivel hídrico.

Las primeras lluvias de ayer dejaron solo dos litros por metro cuadrado en Vigo, pero en zonas de la provincia de Pontevedra como Ponteareas o Mondariz-Balneario cayeron 19 litros por metro cuadrado, mientras que en Monte Aloia se registraron 15 litros, según la información de Meteogalicia.