El lácteo gallego vive una constante agonía desde la desaparición de las cuotas lácteas -que regulaban la producción en toda la UE- en abril del año pasado. La crisis de precios agravada por el excedente de leche en los países europeos colocó un año más a Galicia como la comunidad en la que los ganaderos menos cobran por la venta de la leche, con una media de 27,9 céntimos por litro. El mínimo se alcanzó en el mes de junio con apenas 26,7 céntimos, un 22% por debajo de los costes de producción y la cifra más baja desde la otra gran crisis del lácteo en 2009.
La época de vacas flacas se ha llevado por delante desde principios de año 476 granjas, al pasar de las 9.211 contabilizadas en enero a las 8.602 de octubre, último mes del que hay datos del Fondo Español de Garantía Agraria. Si se comparan las cifras con hace un año respecto a octubre de 2015, la sangría asciende a las 609 explotaciones cerradas. También se redujo la producción láctea en un 3% -de 214.547 a 209.581 toneladas- pero aún así, los ingresos de los productores gallegos crecieron un 8% con 705.330 euros más. Es decir, cada vez hay menos ganaderos que realizan entregas de leche a la industria, pero pese a las adversas condiciones del mercado han logrado incrementar sus ingresos y remontar tras la caída del 13% durante el ejercicio anterior, justo después de la desaparición de las cuotas.
Las explotaciones lácteas ingresaron de media al mes durante este año unos 60 millones de euros, lo que supone una media mensual de 7.065 euros por granja, unos 543 más que los 6.521 recaudados cada mes a lo largo del año 2015.
A pesar de concentrar el 55% de las explotaciones de toda España y casi el 40% de la producción láctea, Galicia se sitúa a la cola en cuanto a precios, con un céntimo menos por litro que la media estatal. Ese céntimo de diferencia se traduce en la pérdida de 3.589 euros al mes en cada granja respecto a la media nacional, es decir, un 34% menos respecto a lo que ingresarían solo cobrando un céntimo más por litro.
La diferencia es más evidente aún si se comparan los resultados del lácteo gallego con Canarias, la comunidad en la que más cobran los productores. En concreto, 45 céntimos, cinco más que la media nacional y seis por encima de lo que perciben los ganaderos gallegos. Canarias cuenta con apenas 127 explotaciones y aunque es la sexta comunidad con menos granjas, sus dueños son los más ricos de España al percibir cada mes de media unos 11.221 euros. Son unos 4.156 euros más que lo que ingresa un productor gallego, lo que en términos relativos significa un 42% más de recaudación a favor de los canarios.
En la clasificación nacional, junto con Canarias copan el podio los productores vascos, que percibieron el pasado octubre 34,6 céntimos; y los asturianos con 32,3. Por el contrario, Galicia aparece en el último puesto y con ella en la cola del ranking están Cantabria y Murcia, donde los ganaderos tampoco recibieron más de 29 céntimos.
