La voz con mayor peso simbólico de la izquierda rupturista terció hoy en medio de la polémica sobre el liderazgo de Luís Villares, portavoz parlamentario de En Marea, para situarse de forma contundente a favor de convertir al exmagistrado en la "referencia inequívoca" del partido y "dejarse de caralladas".

Tras la intervención de Beiras, el plenario de En Marea aprobó un reglamento de las primarias que enmienda el veto al concurso de Villares que había propuesto una parte de la coordinadora provisional . Podrá optar al Consello das Mareas -el máximo órgano de dirección de 35 miembros- y a la coordinadora. Villares ya anunció su intención de concurrir a la consulta en una lista.

Aun así, queda en el aire que la dirección que salga de la cita de los días 21 y 22 de enero opte por nombrar un portavoz nacional o equivalente.

En Marea celebra hoy el plenario para elegir las normas de su asamblea de enero en la que unas primarias determinarán su dirección. Una parte del partido prefiere una cúpula "coral" y evitar que Villares asuma el rol protagonista como primer espada del parido instrumental, postura en que se encuentran los alcaldes de A Coruña, Xulio Ferreiro, y Ferrol, Jorge Suárez, o los diputados de En Marea en el Congreso Yolanda Díaz o Antón Gómez Reino.

El sistema que permitirá a Villares optar a la dirección o solo acceder a ella por su condición de portavoz en el Parlamento se decide esta tarde. En medio del debate, Beiras, portavoz de Anova, ha tomado partido tras destacar la decisión de Villares de abandonar la judicatura para ser el candidato de En Marea a la Xunta el pasado 25-S.

El propio Villares reconoce su deseo de presentarse a las primarias al frente de una lista si el reglamento se lo permite. Esta mañana reiteró esa postura. "Seré lo que la formación quiera que sea", indicó.

"Si dio ese paso, que se deje todo el mundo de caralladas si es que hay alguien que piense en ellas. Aquí lo que hay que hacer es arropar a Villares para hacer la labor que tiene que hacer", espetó Beiras en declaraciones a los medios antes de participar en la reunión. No se quedó ahí. Su partido, uno de los impulsores de En Marea, también secunda esa postura. "Yo estoy decidido absolutamente a darle todo mi apoyo y Anova también", añadió, por lo que el resultado de esta tarde evidenciará la existencia de un bando perdedor: el que prefiere una dirección plural sin una figura destacada y el que desea que Villares sea el máximo referente.

Referente, no líder todopoderoso

Pese a su postura, Beiras matiza que no se trata de entregarle un poder omnímodo a Villares, sino de potenciarlo como referente, es decir, que si ostenta un puesto de portavoz nacional no tendrá que asumir de forma automática "poderes propios del secretario general de un partido tradicional o de un presidente en un partido presidencialista". "Sabe perfectamente ser el portavoz y no ejercer como si tuviera poderes extraordinarios", resumió el histórico nacionalista.