El candidato del PSdeG a presidir la Xunta, Xoaquín Fernández Leiceaga, se atribuyó a sí mismo y a la gestora del partido la responsabilidad sobre los cambios en las listas socialistas de Pontevedra y Ourense, que ayer validó Ferraz. Con ese movimiento, ambos situaron en puestos de salida a Patricia Vilán, Xulio Torrado y Gonzalo Caballero, que no habían sido propuestos por la ejecutiva provincial.
La dirección de los socialistas pontevedreses había advertido de que si Ferraz modificaba su propuesta se actuaría de "forma sectaria". Leiceaga quiso evitar la polémica y pidió "mirar al frente para desbancar" al PP ante la pregunta de si temía una guerra interna durante la campaña. "Ahora son las listas del candidato, la gestora, las ejecutivas provinciales y las bases", alegó en rueda de prensa esta mañana. Las modificaciones también se extendieron a Ourense, donde se eliminó del tercer puesto a la pachista María Quintas, secretaria de Organización provincial, en beneficio de Carmen Dacosta.
Leiceaga defendió la renovación del 72% que suponen las candidaturas y eludió responder a sí había conversado con el alcalde de Vigo, Abel Caballero, sobre la inclusión en el puerto número 5 de la lista por Pontevedra de Gonzalo Caballero, su sobrino y crítico con su gestión. Este último intentó participar en las primarias socialistas, pero al no conseguir los avales necesarios apoyó a Leiceaga frente a José Luis Méndez Romeu, impulsado por el regidor. "Se respetó escrupulosamente el procedimiento", respondió dos veces Leiceaga a la pregunta sobre si había dialogado con el también presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias.
Por otro lado, Leiceaga propuso una reducción de 500.000 euros en el techo de gasto electoral de los partidos políticos durante la campaña. Enviará la idea a PP, EN Marea, BNG y Ciudadanos.
