El Ministerio de Sanidad asegura que varios países del entorno tienen calendarios similares al nuevo de España, "sin que se observen diferencias en la protección frente a las dolencias que se previenen con vacunación. Además de reducir los pinchazos a los bebés y las citas para administrarlos, Sanidad alega que se realiza una "mejor gestión de los recursos disponibles" y apunta que el cambio ayuda a "paliar" los efectos causados por el problema temporal de suministro de algunas vacunas con componentes de tos ferina.
Lo que mantiene el calendario sin cambios son los pinchazos para la meninigitis C a los 4 y a los 12 meses, la triple vírica a los 12 meses y a los tres años, y la del tétanos y difteria a los 14. Sin embargo, incluso esos pinchazos podrían reducirse porque lo "previsto" es administar en una inyección (vacuna tetravírica) la triple vírica y la varicela. Por otro lado, este año se empezó a vacunar a los 15 meses de la varicela y la Xunta seguirá protegiendo a los 12 que no pasaron la enfermedad. La vacunación contra el papiloma se trasladó este año a las niñas de 12 años, pero hasta 2018 seguirá en las niñas de entre 12 y 14 años.