La nueva evaluación de Bachillerato, que comenzará a aplicarse el próximo año, será "muy similar" a la actual selectividad y no tendrá preguntas tipo test. El Gobierno central había establecido, en la propuesta inicial para la reválida final (que sustituirá a selectivo), un examen tipo test. El ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo, descartó hoy el modelo de preguntas cortas y expresó que el examen será muy parecido a la actual selectividad. Se trata de la reválida de Bachillerato, que la Lomce establece para el final de la etapa y como paso previo a la Universidad.

El ministro de Educación, en rueda de prensa, aseguró además que la prueba "valdrá para acceder a cualquier universidad española", confirmando la información de ayer de FARO, con la propuesta de las universidades gallegas de que la reválida de Bachillerato sirva de prueba de acceso a las universidades (al principio, con la Lomce, se planteaba que el alumnado realizara una reválida final de Bachillerato y, después, una prueba de acceso a la universidad). Se perfila que será una sola prueba, en lugar de dos, según las palabras de las universidades, del director xeral de Universidad de Galicia y, ahora, del ministro de Educación. "Valdrá para acceder a cualquier universidad", apuntaron esta mañana en el encuentro con la CRUE (Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas).

El objetivo es sacar adelante una norma general para que la prueba sea "única en toda España, pero flexible para que las comunidades autónomas desarrollen los exámenes cada una en su territorio", según ha explicado Piriz, de la CRUE, que apuntó que a los rectores lo que les "preocupaba" era que se "rompiera" con el llamado 'distrito único' y la nota obtenida no sirviera a los estudiantes para acceder a cualquier universidad, como ocurre ahora.