La nueva Ley de Patrimonio Cultural de Galicia, que actualiza la de 1995, fue aprobada ayer en el pleno solo con los votos del PP y el rechazo de todos los grupos de la oposición, que consideran que esta norma "empeora" la anterior, mantiene los "privilegios" para las propiedades de la Iglesia y "rompe con el consenso" existente hasta ahora en la regulación de bienes culturales.
Frente a ello, Agustín Baamonde (PP) enfatizó que esta norma, que permite que los ayuntamientos puedan autorizar determinadas actuaciones sin consultar con la Xunta, simplifica la tipificación de categorías de elementos protegidos -BIC y bienes catalogados-, apuesta por la "difusión" del patrimonio e incorpora "más conductas sancionables" con "más garantías jurídicas".
La nueva ley unificará tres normas ya existentes, la de 1995, la de protección de los Caminos de Santiago, de 1996, y la de dotación artística en las obras públicas en las rutas jacobeas, de 1991
El Parlamento también aprobó la Ley de Economía Social de Galicia y lo ha hecho sólo con el voto favorable del PPdeG. Los cuatro grupos de la oposición optaron por oponerse al texto con el argumento de que no propugna "un modelo económico alternativo" y de que "da barra libre" para comerciar con los servicios sociales.
