Durante el periodo comprendido entre 2009 y 2014, los inspectores del Ministerio de Empleo impusieron sanciones que suman más de 11,6 millones de euros a empresas gallegas, tanto por exceder los topes de temporalidad como por incumplir las normas que obligan a convertir en indefinido a un empleado temporal.

A pesar de la subida de casos de esos trabajadores, las sanciones descendieron desde los 2,2 millones de 2011, pasando a 1,8 tanto en 2012 como 2013, y reduciéndose a 1,7 en 2014, según los datos del departamento que dirige, en funciones, la ministra Fátima Báñez.

A nivel estatal, la cifra de esas sanciones sumó algo más de 139 millones de euros, con una caída del 30,1% desde los 27,2 del ejercicio 2009 a los 19 del año 2014.