Educación ve el diagnóstico es positivo pero se pone deberes, y a los centros, docentes y padres. Estos últimos, explicó el conselleiro, deben implicarse más, ya que solo el 9% respondió al cuestionario. En aras de "apostar" por su "mayor participación" en la mejora de la convivencia en las aulas, Rodríguez se comprometió a "impulsar" las escuelas de padres y de madres con ayuda de las ampas para crear una estructura "estable en red" para formar a las familias.

La Xunta también "reforzará más" la formación del profesorado y la figura de los tutores y diseñará "orientaciones específicas" para los espacios "más conflictivos", los recreos y las entradas y salidas de los centros. Asimismo se potenciará la mediación como un recurso "valioso" para prevenir y abordar conflictos entre profesores y alumnos. El informe revela que un 80% apuesta por el "diálogo" para atajar estas situaciones y el 90% de los docentes defiende recurrir a la prevención.

Desde diciembre los centros disponen de los resultados de su informe particular para que adapten sus planes de convivencia. Rodríguez apunta que no hay "grandísimas diferencias" entre rural o urbano y centro y periferia.