La Plataforma Víctimas Alvia 04155 reclama la apertura de una investigación sobre "todas y cada una" de las adjudicaciones, operaciones y facturación para la puesta en funcionamiento de la línea de alta velocidad entre Ourense y Santiago, donde el descarrilamiento de un tren en julio de 2013 mató a 81 personas y dejó más de un centenar de heridos. Ante las informaciones sobre constructoras que habrían regalado viajes de placer a excargos de Adif encargados de adjudicar y certificar los trabajos de la alta velocidad en Cataluña, la plataforma de víctimas del siniestro de Angrois señala que "visto lo visto", sería necesario proceder a una auditoría externa independiente de Adif y Renfe, para conocer "cualquier tropelía, ilegalidad o abuso que haya podido cometerse en todos estos años, y que podría de nuevo poner en riesgo la vida de los viajeros". La plataforma se pregunta "si también la corrupción ha contribuido a una tragedia que dejó 81 muertos y más de 140 heridos".