La que fuera conselleira de Sanidade Rocío Mosquera dejó la Xunta el pasado mes de octubre prácticamente con el mismo balance patrimonial que declaró tres años antes cuando tomó posesión de la cartera al inicio de la legislatura. Si entonces aseguró que sus bienes eran de 107.000 euros y sus deudas de 30.000, ahora informó de que su patrimonio ascendió hasta los 113.000 euros y que el pasivo se reduce en casi 3.000 euros hasta los 27.000.

Sí cambió la situación de la exresponsable de Facenda Elena Muñoz. Llegó a la Xunta con 71.000 euros en bienes y 84.000 en deudas y dejó el Gobierno gallego -para ser la cabeza de lista municipal por el PP en Vigo- con un patrimonio de casi 107.000 euros pero con unas deudas que se triplicaron, al llegar a los 245.000 euros.

Jesús Vázquez -exconselleiro de Educación- mejoró en ambos apartados durante su paso por la Xunta. Mejoró su patrimonio en 12.000 euros para alcanzar los 272.000 y redujo las deudas de 250.000 a 219.000 euros.

Agustín Hernández, ex de Medio Ambiente, también incrementó su bienes en 6.000 euros hasta los 181.000 y rebajó el pasivo a 136.000 euros.