La detención y encarcelamiento de dos titiriteros en Madrid el pasado sábado por supuesto enaltecimiento del terrorismo al exponer en una función un cartel con la frase "Gora Alka-ETA" ha tenido su continuación en Galicia. M.S., un ourensano de 29 años que prefiere que de momento solo se le indentifique por las siglas de su nombre, fue identificado la madrugada del pasado martes por la Policía Nacional por portar una cartel, en la celebración del Carnaval, con el mismo lema. Los agentes, además, pusieron los hechos en conocimiento del juzgado del guardia de Ourense para que determine si, como también sucedió en Madrid, se considera que el acto puede constituir apología del terrorismo.

M.S. llevaba una pancarta sujeta a un palo de escoba y era el complemento de su disfraz de marionetista en la celebración del Lunes de Entroido en la capital de la provincia. Según él, tan solo se trataba de un gesto, de una crítica al polémico encarcelamiento de los dos titiriteros en Madrid. "Los que somos de Ourense entendemos lo que significa el Entroido, un escarnio con lo que está ocurriendo, sin ánimo de ningún tipo de molestar a nadie. Es surrealista que pase esto", manifestaba ayer M. S. a FARO.

Su identificación se produjo en una abarrotada Plaza Mayor de ourensanos celebrando el lunes de carnaval. Varios agentes de Policía Nacional se acercaron a él y al grupo que lo acompañaba. "Eran las dos y media, más o menos, y se presentaron 7 o 8 policías nacionales". M. S. creyó, en un principio, que se trataba de una broma. "Hasta que me intentaron coger la pancarta y me echaron el brazo hacia atrás, con la típica llave de detención. Ahí me di cuenta de que iban en serio", relata.

La operación se produjo ante cientos de testigos. "Me dejé llevar al furgón, donde me identificaron". Según el ourensano, "aseguraban que se habían recibido varias llamadas denunciando el cartel, y que podría ser apología del terrorismo". La Comisaría Provincial y la Subdelegación del Gobierno confirmaron que el atestado fue remitido al juzgado de guardia para que obre en consecuencia.

A la titular de Instrucción 3, que se ocupó del turno hasta la mañana del martes, no le constaba el boletín policial ayer. La denuncia habría recaído en Instrucción Número 1, la sede de guardia desde anteayer. Sería el magistrado Leonardo Álvarez -que tampoco tenía conocimiento ayer- el que decida si se queda con el atestado y ve indicios de algún ilícito. De apreciar un delito de apología o enaltecimiento, el caso llegaría a la Audiencia Nacional, el tribunal competente.

Esta actuación policial suscitó una oleada de reacciones en contra en las redes sociales. Además del joven de Ourense disfrazado de titiritero, la Policía tomó los datos a dos amigos que le acompañaban y a una tercera persona que se interesó por él mientras los agentes lo conducían al furgón. El caso ha trascendido gracias a la denuncia pública de Esculca, el Observatorio para a Defensa dos Dereitos e Liberdades.

Precisamente ayer por la tarde salieron de la prisión de Soto del Real los dos titiriteros encarcelados desde el sábado. Raúl García Pérez, de 34 años, y Alfonso Lázaro de la Torre, de 29, dejaron la cárcel después de que el juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno, a instancias del fiscal, haya aceptado su recurso y ordenado su puesta en libertad con cargos.