Salvador Gómez Crespo, el último de los 9 detenidos que faltaba por declarar de la Operación Jaro el pasado mes de octubre, fue interrogado ayer en el Juzgado de Instrucción 3 de Vigo mediante un exhorto del juez Eloy Velasco de la Audiencia Nacional. Gómez, que no pudo ser trasladado a Madrid por problemas de salud, manifestó ante la magistrada Marisol López que su actividad es política y no terrorista.

A Salvador y otro de sus hermanos se les considera impulsores de Causa Galiza, colectivo sospechoso de dar cobertura a Resistencia Galega. Gómez manifestó que su actividad "es política, incómoda para el Estado, pero no terrorista". El abogado Manuel Chao adelantó que pedirán el archivo de la causa para todos los implicados porque "es un disparate pensar que si no hay ni siquiera una organización armada pueda haber una organización política que la apoya".