Ningún comentario ante su directiva, puertas adentro, y evasivas después, a preguntas de los periodistas. Desde que en octubre salió a la luz la denuncia de una mujer que lo acusa de prometerle un empleo fijo a cambio de sexo, el barón del PP ha circunscrito el asunto al ámbito personal. Ayer se ratificó en esa postura, aferrándose a una fórmula evasiva y breve, ante cada pregunta. "Ningún comentario;ese tema no ocupa ni una milésima de segundo", dijo.

El presidente del PP de Ourense tenía programada su comparecencia tras la junta directiva provincial, y no la rehuyó pese a la noticia de su imputación, pocas horas antes. Compareció y se centró en lo orgánico. Amante de los datos, Baltar anunció el proceso para el décimo séptimo congreso del PP de Ourense en el que tendrán voto 1.070 compromisarios, para dar voz a los más de 25.000 militantes del parttido en la provincia. El cónclave tendrá lugar en el Pazo Paco Paz el 5 de marzo, 5 días antes de su declaración judicial. Baltar optará a la reelección para conservar por un tercer mandato el cetro que heredó de su progenitor en 2010.

Los tres grupos opositores de la Diputación de Ourense, (PSdeG-PSOE, DO y BNG), así como Alternativa Galega de Esquerdas (AGE), la cuarta fuerza en representación en el Parlamento de Galicia, reaccionaron ayer a la citación como investigado de José Manuel Baltar pidiendo que dimita. Instan además al presidente de la Xunta y el PP gallego, Alberto Núñez Feijóo, a que fuerce su salida.Ya lo pretendieron cuando el caso, con grabaciones incluidas, fue denunciado en Fiscalía en octubre.