La ministra de Fomento en funciones, Ana Pastor, ha confirmado que el túnel de Bolaños del AVE, situado en el subtramo Vilariño-Campobecerros (Ourense) estará terminado en agosto.
Así lo señaló este lunes, durante una visita para conocer los avances en las obras del túnel izquierdo de Bolaños, de los que ya se han perforado 1.400 metros de los 6.700 previstos, mientras ha mostrado su confianza en que el próximo trimestre estén solucionados los problemas del último tramo pendiente de licitación: el que unirá Taboadela con Ourense.
Pastor ha confirmado que las obras avanzan "a muy buen ritmo" y que ya están colocadas las dovelas --las piezas que conforman el muro interior del túnel-- "en más de kilómetro y medio".
"A medida que el equipo avanza, cada día adquiere mayor velocidad. Se espera que los trabajos estén concluidos en el mes de agosto", ha asegurado la ministra en funciones.
Durante su encuentro con la prensa, Pastor ha remarcado en que el túnel de Bolaños es una de las infraestructuras "más complejas" en el articulado de los 21 tramos del AVE en la provincia.
De hecho, lo ha calificado como "una de las obras más importantes de ingeniería" que se están haciendo "no sólo en España, sino en toda Europa".
El horizonte, 2018
La ministra ha insistido en que los técnicos señalan como horizonte final de las obras del AVE el año 2018 y, en este sentido, garantiza que desde el Gobierno en funciones "se sigue trabajando al mismo ritmo" que antes de las elecciones.
"Cuando llegué al Gobierno, había invertidos apenas 400 millones en esta obra. Para que sea una realidad lo que hay que hacer es poner el dinero suficiente, estar rodeado de los mejores profesionales y hacer posible que estas infraestructuras vayan adelante", sostiene.
Así, Pastor ha agradecido la presencia de la conselleira de Infraestructuras, Ethel Vázquez, para poner en valor la colaboración recibida por parte de la Xunta de Galicia.
Entre los asistentes a la visita también se encontraban el delegado del Gobierno en Galicia, Santiago Villanueva; el subdelegado del Gobierno en Ourense, Roberto Castro, así como senadores en funciones del PP por Ourense y alcaldes de la comarca.
El tramo ourense.Taboadela
La ministra también se ha referido al último tramo pendiente de licitación, el que unirá Taboadela con Ourense, para recordar que la obra está dividida en dos subtramos con problemas diferentes, pero que confía estén resueltos en el segundo trimestre de 2016.
En uno de los subtramos había un problema relacionado con la eliminación de los vertidos. Pastor apunta que se está "ultimando" con el Instituto Galego de Vivenda e Solo el traslado de ese vertido para que las obras se puedan realizar "lo antes posible".
Respecto al segundo subtramo, la ministra ha indicado que se espera que este trimestre se pueda "tener respuesta de (Ministerio) Medio Ambiente" con el fin de que las obras "ya se puedan licitar".
Por último, la ministra también ha informado de que la Xunta, el Ayuntamiento de Ourense y el Ministerio de Fomento mantuvieron una reunión para impulsar el diseño de la nueva estación de Ourense. "Se está diseñando el proyecto para hacer una estación que sea digna de la entrada de la Alta Velocidad en Galicia", resalta.
Los túneles
El túnel izquierdo de Bolaños se sumará a la obra ya acabada en el túnel derecho. Se trata de dos túneles gemelos que unirán Campobecerros y Vilariño de Conso, con una extensión de 6,7 kilómetros, que están siendo excavados con una tuneladora de la marca HK, de fabricación alemana.
El jefe de obras, Óscar Álvarez, destaca que actualmente "están ejecutados 1.600 metros" del túnel izquierdo y que el ritmo de trabajo de la máquina tuneladora es de "un metro la hora", lo que supone unos 20 metros al día a través de un terreno de pizarra.
Los túneles tienen una amplitud de 9.800 milímetros, que son recubiertos con piezas construidas en Campobecerros, unas dovelas que dejan el hueco interior con un diámetro de 8.500 milímetros.
Sistema de aislamiento pionero
Álvarez ha subryado que Bolaños cuenta con un "sistema pionero en España" y que "sólo se está usando en Japón y EE.UU." para el relleno del espacio entre la pared excavada y las dovelas que conforman el interior del túnel.
En concreto, se trata de un sistema de relleno a partir de un bicomponente que consiste en una mezcla entre arcilla, cemento y agua, que es activada con un silicato. La reacción química provoca que la mezcla se convierta en 20 segundos en un gel que evita el paso del agua hacia el interior de la vía.
Finalmente, Álvarez ha llamado la atención sobre que el sistema permite que el agua no se desvíe de sus cursos naturales a través de la vía, sino que siga con sus recorridos por el interior de la tierra.
