El BNG necesita "claramente resetearse ante su deriva electoral", según el alcalde de Pontevedra, Miguel Fernández Lores. Pero añade que él no piensa asumir el liderazgo de la formación frentista y advierte de que tampoco debería realizarse en alianza "con fuerzas de fuera de Galicia", en clara alusión a la posibilidad de acercamientos a Podemos. Por segundo día consecutivo, el único regidor urbano del BNG y una de las referencias internas de la formación nacionalista, ofreció ayer su opinión sobre la situación interna del Bloque. Si el día anterior aconsejaba un cambio profundo en su cúpula, ayer, además de insistir en esa idea, dejó claro que no está dispuesto a asumir las riendas: "yo estoy muy a gusto aquí" (en el Concello de Pontevedra). Así, se autodescartó para encabezar esa renovación, al tiempo que puso en cuestión algunas ideas del portavoz nacional, Xavier Vence, que ya anunció que abandonaba el cargo.

Sobre esta marcha, Lores evitó hacer comentarios porque "es una decisión individual", pero si insistió en que "la necesidad de resetear (el BNG) es clara ante la deriva electoral, sobre todo en las citas generales y europeas, que no es el camino a seguir". En todo caso, a su juicio, "el BNG sigue siendo necesario". "Yo siempre fui del BNG y quiero seguir siendo del BNG, pero hay que tomar decisiones para recibir el apoyo de la mayor parte posible de la sociedad", asegura. Esta reflexión supone, implícitamente, una crítica a la decisión de acudir a las pasadas elecciones generales bajo la denominación de Nós, renunciando a las siglas tradicionales.

En medio del debate sobre si el BNG debería aliarse con En Marea, Lores insiste en que esa regeneración de su formación "no debe venir por ceremonias de la confusión, saltos en el vacío o posicionamientos únicamente de rentabilidad electoral". "Debemos estar juntos todos los que pensamos que este país tiene futuro y formar coaliciones con fuerzas de fuera de Galicia no creo que sea el camino a seguir.", asegura.