Los datos de inserción laboral de los egresados recientes del sistema universitario gallego mejoran por segundo ejercicio consecutivo después de que los años de crisis también pasaran factura a este colectivo y dan pie al conselleiro de Cultura e Educación, Román Rodríguez, para apuntar que el sistema universitario es la "mejor" opción para encontrar trabajo. La Axencia para a Calidade do Sistema Universitario de Galicia (Acsug) presentó ayer el avance de un informe que muestra que en diciembre de 2014, dos años después de finalizar sus estudios, trabajaba el 67,53 por ciento de los titulados en alguna de las tres universidades gallegas en el curso 2011-2012, cuatro puntos más que entre los egresados un año antes y nueve puntos más que en la promoción que finalizó en 2010.
El máximo responsable de Cultura e Educación celebraba ayer estos datos, que confirman "la tendencia positiva" de inserción laboral del colectivo, "recuperando niveles superiores a los del inicio de la crisis" (en 2009 el porcentaje de empleados era del 66,11%). También aludió el conselleiro a la "estabilización" a nivel salarial en comparación con años precedentes.
No obstante, en la práctica, y con los salarios deflactados aplicando la variación del IPC, los bolsillos de los recién estrenados trabajadores siguen achicándose. Los egresados de 2012 ganan de media, según el informe de la Acsug, 1.037,08 euros netos al mes, una cifra que implica 20 euros menos con respecto al año anterior y de más de 233 menos (una caída de un 18,4 por ciento) si se los compara con los sueldos de los que se graduaron en 2007, un lustro atrás, y que fueron entrevistados por la Acsug en 2009, quienes percibían una media de 1.270,97 euros al mes .
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Año tras año desde 2010, los informes de la Acsug muestran el progresivo deterioro de los salarios que perciben los universitarios que se estrenan en el mercado laboral y constatan cómo se ha ido incrementando el porcentaje de los que tienen que apañárselas con menos de 500 euros al mes, que se triplicó entre 2009 (egresados de 2007) y 2014, cuando alcanzó al 15,4%. Eso puede ayudar a explicar la baja tasa de emancipación de los jóvenes gallegos. El grupo más numeroso, que abarca el 38% del total, gana entre 500 y mil euros al mes, cuando antes de la crisis el colectivo abundante era el que percibía entre 1.000 y 1.500. Aunque un 45 por ciento superan la barrera de los mil euros, solo un 12,6 por ciento gana más de 1.500 y únicamente un reducido grupo, un 4%, ingresa más de dos mil euros mensuales.
Diez meses para un empleo
Pese a que los porcentajes de empleo van remontando entre el colectivo, el trabajo se hace ahora más de rogar cuando se trata de buscar uno vinculado con la titulación estudiada. Los egresados del curso 2011-2012 entrevistados el año pasado tardaron prácticamente el doble de tiempo que sus compañeros de la promoción que finalizó en 2007 en encontrar esa oportunidad laboral: 9,79 meses frente a los 4,79 meses de entonces. De hecho, como apunta la Acsug, aumenta más de veinte puntos (hasta casi el 45%) el porcentaje de titulados que tardan doce meses o más en conseguir un puesto vinculado a lo que estudiaron. Con todo, las cifras indican que uno de cada cuatro tiene más suerte y deja de estar desempleado antes de tres meses.
Los métodos más utilizados por los universitarios para encontrar su primer empleo fueron internet, la presentación espontánea de su candidatura o a través de familiares o amigos. Mediante esta última vía hallaron uno de cada cinco empleos, mientras que la red propició el 14,6% de los trabajos y la candidatura espontánea, un 17,2%.
El informe revela que en el momento de la encuesta la mayoría de los titulados (un 82%) desarrollaba su labor en Galicia. Un 86 por ciento de los egresados trabajaba por cuenta ajena y, de ellos, el 1,3% trabajaba sin contrato. En cuanto al tipo de tareas que llevaba a cabo, el 71 por ciento se ocupaba de funciones propias de un nivel universitario y, dentro de ese grupo, un 81 por ciento se encargaba de cometidos específicos de su titulación. En todo caso, un 88,8% aseguró que volvería a cursar estudios universitarios y un casi todos repetirían título y universidad.
Los universitarios "ninis" siguen cayendo y solo el 13% no estudia ni trabaja ni oposita
- El 23% de los titulados en 2012 seguía estudiando en 2014, cuando la Acsug realizó la investigación. Aparte, el 45% de los encuestados declaró tener otra titulación universitaria acabada, aparte de aquella por la que fue entrevistado. El avance del informe sobre la inserción laboral de los graduados en 2011-2012 también constata que uno de cada preparaba oposiciones, cinco puntos más que en el estudio del año anterior, aunque a bastante distancia del 29% que se decantaba por esta alternativa un lustro atrás. Un 11,6% compagina estudios y trabajo, mientras que el dato anterior era del 6,9%. Pero algunos van más allá y, aparte de formarse y trabajar, también preparan oposiciones (un 1,4%).Con todo, la alternativa opuesta también existe: el 13,5% de los titulados en 2012 admitió que no cursaba estudios universitarios adicionales, ni preparaba oposiciones ni trabajaba cuando se le pasó el cuestionario. No obstante, como apuntan desde la Acsug, este porcentaje viene reduciéndose en los últimos estudios de inserción laboral que realizó la entidad.Además de avanzar datos de su estudio de inserción de los egresados del curso 2011-2012, la Acsug ofreció más detalles de su informe relativo a la de 2010-2011, cuyas líneas generales ya se habían presentado. Este documento revela que el 63% de los titulados trabajaba al hacer la encuesta y que un 3,6% lo hacía en un sector no relacionado con su carrera. El porcentaje más alto de titulados con empleo se daba en Ciencias de la Salud (75%).
