Tres meses después de que la popular Elena Candia se alzase por sorpresa como presidenta de la Diputación de Lugo, PSOE y BNG registraron ayer una moción de censura que permitirá a los socialistas recuperar su antiguo bastión, en el que gobernaron durante ocho años, y que además es el feudo de su secretario xeral, Xosé Ramón Gómez Besteiro. Hacerse con el gobierno de la corporación de Lugo abre además al PSdeG las puertas a arrebatar al PP la Presidencia de la Fegamp (Federación Galega de Municipios e Provincias). Esto será posible porque han conseguido el respaldo del alcalde de Becerreá, Manuel Martínez, quien el pasado mes de junio se negó a votar a favor del candidato que proponía su partido para presidir la corporación provincial, el regidor de A Pontenova, Darío Campos. Ahora lo apoyará, dejando de lado sus aspiraciones a ocupar él mismo el sillón de presidente, y con la condición de formar parte del gobierno provincial.

Manuel Martínez fue el primer candidato propuesto por el PSOE para presidir la Diputación de Lugo el pasado mes de junio, pero el BNG se negó a apoyarlo por estar imputado, lo que obligó a los socialistas a buscar un aspirante alternativo. El alcalde de Becerreá dio la sorpresa al votar en blanco dando así la Presidencia de la corporación provincial al PP.

Desde entonces los socialistas mantuvieron contactos con el alcalde díscolo que fructificaron ayer finalmente en una reunión en un hotel en Rábade (Lugo) en la que Manuel Martínez terminó por estampar su firma en la moción de censura pactada por PSOE y BNG. "Manolo Martínez no es terco y hay cierta flexibilidad", comentaba minutos antes del encuentro. Esto permitió que poco después socialistas y nacionalistas registrasen la moción de censura que será debatida en un pleno extraordinario el 8 de octubre.

El escenario será el mismo que en junio. El candidato será el socialista Darío Campos y su elección se fía a la vuelta al redil del regidor de Becerreá. El acuerdo llega además a poco más de un mes de que se elija la dirección de la Fegamp que ahora ocupa el PP. La Presidencia de la Diputación de Lugo permitirá al PSdeG tener más representantes en el ente municipalista y hacerse así con la Presidencia de esta institución, de manera que los socialistas no solo ostentarán el poder de la federación española, presidida por Abel Caballero, sino también de la gallega.

Con la recuperación de la Diputación, el PSdeG endereza además el traspiés que le hizo perder el poder provincial en Lugo y dar un poco de aire a Besteiro, golpeado primero por este desliz en la corporación que él mismo presidió hasta 2015 y luego por su imputación por presuntas irregularidades en la compra y reforma de su piso.

Socialistas y nacionalistas justificaron ayer la moción de censura por la necesidad de "recuperar un gobierno progresista y nacionalista, que acabe con las políticas del PP". El presidenciable, Darío Campos, garantizó además Martínez un puesto en el gobierno provincial, aunque no concretó el área.

Candia definió como "esperpéntico" el proceder de PSOE y BNG y defendió su gestión en la Diputación. Por su parte, el director de la campaña del PPdeG, José Manuel Rey, tildó el acuerdo de "moción de la vergüenza".