La captación de inversión extranjera se ha convertido en una auténtica obsesión para la Xunta. En una de las patas fundamentales de la estrategia que tiene entre manos para que la comunidad pegue el estirón que compense los más de seis puntos de Producto Interior Bruto (PIB) que perdió durante la doble recesión. De hecho, la Consellería de Economía e Industria acaba de contratar a tres firmas de consultoría para rastrear proyectos interesados en implantarse en Galicia. La sexta economía española es, sin embargo, la quinta con menor implantación de firmas foráneas, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) publicados ayer. Las filiales de empresas extranjeras representan únicamente el 0,17% del total de compañías asentadas en 2013 en la autonomía, pese a que su número ha ido en constante aumento en los últimos años. Por primera vez superan las 200, el doble que hace cinco años.

Son, exactamente, 206, con un alza respecto a 2012 del 13,2%. En números absolutos, Galicia ocupa el séptimo lugar del ranking autonómico, pero en comparación con las dimensiones de su tejido empresarial, la comunidad cae a los puestos de cola. Y en proporciones que no tienen nada que ver con el conjunto del Estado, donde las foráneas suponen el 0,53% del total de sociedades operativas. La media está muy influida por el relevante peso que las compañías con sede en otros países ostentan en las dos grandes economías españolas. En Madrid, que alcanza el 1,35%; y Cataluña, con cerca del 1%. Por detrás de Galicia figuran Andalucía (0,16%), Castilla y León (0,15%), Murcia (0,14%) y Castilla-La Mancha (0,13%).

En el área que el Igape dedica en su web a la inversión extranjera en Galicia, el organismo destaca como históricos casos de éxito el desembarco de PSA Citröen, Alcoa, Denso, Snop Estampación, Bosch, Stolt Sea Farm y Lonza. La relevancia de estas marcas vaticina lo que las magnitudes de negocio confirman: que las filiales foráneas en Galicia son pocas, pero de gran envergadura.

Su facturación superó en 2013 los 9.500 millones de euros, el 12,6% de todas las empresas activas en la región. El valor de la producción llega incluso hasta el 19%, con 8.771 millones de euros. De toda la inversión empresarial en Galicia, el 20%, por encima de los 400 millones, viene de las filiales extranjeras, que además emplean a 24.683 personas, el 4,9% de los ocupados gallegos.

En la cifra de negocios de las empresas que hay en Galicia, un 25,6% viene de compañías que tienen su sede en otra comunidad. Por lo que la facturación de firmas autóctonas ronda el 62%. Las empresas gallegas, además, cuentan con un 13,1% de su negocio en el resto del país, según el Instituto Galego de Estatística (IGE).