El último informe elaborado en Galicia sobre alcohol y droga revelaba el aumento de la precocidad en el inicio de su consumo por parte de los jóvenes. El cannabis se prueba a los 14,8 años (14,9 en el estudio anterior), la cocaína a los 14,9 (15,5 en el informe de hace tres años) y el éxtasis, anfetaminas y alucinógenos a los 15,1 (15,6 el anterior registro), según los datos del estudio realizado por la Universidade de Santiago y publicado el pasado mes de abril en colaboración con el Valedor do Pobo. En este escenario de adelanto de la edad de inicio es en el que se desarrollará la próxima campaña de la Consellería de Sanidade destinada a prevenir el consumo de drogas en los espacios de ocio nocturno y, especialmente, de botellón, programa que además permitirá, de forma anónima y voluntaria, que los jóvenes puedan analizar en un laboratorio móvil con total discreción la composición de las sustancias con el objeto de comprobar si están o no adulteradas.
Esta prueba funciona como un "gancho" para atraer a los jóvenes hasta la unidad móvil, pero el principal objetivo no es ese análisis, sino explicar los jóvenes los riesgos del consumo de estupefacientes y darles toda la información al respecto para que sean conscientes de los peligros que asumen.
El programa cuenta con una presupuesto de salida de 60.000 euros y está dirigido a una población diana de 16.500 jóvenes de entre 14 y 25 años de edad.
Las actuaciones de desarrollarán en los espacios de ocio nocturno y será obligatorio intervenir en las siete ciudades así como en otras localidades con concentraciones importantes de juventud, ya sea por el verano o la Navidad o por la organización de conciertos.
Así, la previsión es que 8.000 jóvenes de la provincia de Pontevedra sean informados de los riesgos del consumo de drogas: 3.000 en Vigo, 1.000 en Pontevedra y otros 4.000 en poblaciones como Baiona, Vilagarcía, Cangas o Guarda.
En A Coruña la población diana la componen 6.500 personas: 3.000 en la capital de la provincia, 2.000 en Santiago, 500 en Ferrol y 1.000 más en localidades como Ordes, Noia o Carballo. En las otras dos provincias, Lugo y Ourense, la campaña se desarrollará solo en sus respectivas capitales.
En los últimos años, este programa ha sido contratado a la asociación Asociación Ciudadana de Lucha contra la Droga Alborada.
La campaña exige la disposición de una furgoneta con división interior que permita y facilite el anonimato de las personas que acudan a realizar análisis de sus estupefacientes y a solicitar información. Mediante kits de laboratorio, según cuentan desde Alborada, se sabe al momento si las drogas están adulteradas, aunque solo se pueden realizar las pruebas de cocaína, éxtasis y cannabis.
