La crisis demográfica que padece Galicia podría suponer que perdiese un millón de habitantes en el año 2051 si no logra corregir su rumbo, pasando de los 2,7 actuales a 1,7. La Xunta calcula que la comunidad perderá casi el 40% de su población actual en 36 años, por lo que señala esta problemática como el principal reto futuro. "Es, sin duda, una de las principales amenazas que tenemos por delante", indicó ayer la conselleira de Traballo e Benestar, Beatriz Mato.

La dirigente participó, junto con su homólogo de Facenda, Valeriano Martínez, en el acto de apertura de un foro sobre políticas sociales y dinamización demográfica, que sirve de impulso al proceso de aportaciones para elaborar el plan estratégico de Galicia 2015-2020, una hoja de ruta para "saber dónde destinar los mayores recursos económicos de la Xunta en los próximos cinco años" y dónde se primará "la dinamización demográfica, la prevención de la dependencia y la inclusión", según explicó. Para Valeriano Martínez, resulta clave "definir las herramientas más eficaces para cambiar la dinámica demográfica".

El Ejecutivo autonómico ya trazó un diagnóstico y medidas de actuación hace tres años, que plasmó en su plan demográfico. Sus previsiones se mantienen. Si Galicia no modifica la tendencia, perderá 147.000 habitantes en una década y alcanzará los 1,7 millones en 2051, el 37% de la población actual. "De continuar las tendencias demográficas actuales, es previsible que Galicia pueda llegar a perder en cuatro décadas más población de la que ganó en un siglo", alerta el documento. Su máxima sigue vigente, como advirtió ayer Beatriz Mato.

Entre 1900 y 2011, la población gallega aumentó en 814.000 personas hasta alcanzar las 2.795.422, aunque a partir de los años 90 el aumento se debía principalmente al peso de la inmigración. De hecho, Valeriano Martínez recordó ayer los 25 años continuados de saldo vegetativo negativo.

El estallido de la crisis económica borró el peso de la inmigración, evidenciando el escaso índice de fecundidad en la comunidad frente al envejecimiento poblacional. De acuerdo con las previsiones de la Xunta en el año 2021, la población gallega será de 2,6 millones, por 2,2 en 2031 y 1,7 en 2051.

Según estos cálculos, elaborados a partir de los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) y del Instituto Galego de Estatística (IGE), en quince años los ayuntamientos con más de la mitad de vecinos por encima de los 65 años se duplicarán hasta los 61. Las consecuencias más evidentes serán la pérdida de dinamismo económico y el aumento de gasto público. Para Beatriz Mato, sería "muy difícil" lograr un crecimiento económico sostenible que permitiese mantener el actual sistema de bienestar.

Un reto de país

Los conselleiros de Benestar y Facenda coincidieron en la necesidad de consensuar a nivel político una estrategia para elevar la natalidad y situar esta problemática entre las prioridades de la Xunta "gobierne quien gobierne".

Las últimas previsiones del IGE para la próxima década muestran que casi la mitad de las comarcas gallegas contará con el triple de mayores que de jóvenes. Santiago y O Morrazo serán las áreas con menor envejecimiento.

Además, los nacimientos se desplomarán un 27% en el año 2023, lo que supone unos 5.100 menos que en la actualidad. El año pasado se preveían 13.800.