El ayuntamiento de Lugo decidió ayer, con la oposición del PP, retirar los honores al dictador Francisco Franco 61 años después de ser nombrado alcalde honorario. El voto de calidad del regidor socialista, Xosé López Orozco, permitió que el cambio saliese adelante en un pleno en el que también se cambiaron los nombres de 7 calles, con nomenclaturas vinculadas al franquismo.