El inicio de la operación Zeta, una investigación policial contra el fraude de unos 20 millones en subvenciones para cursos, provocó que el presunto líder de la trama, el empresario Gerardo Crespo, cerrase hace un año todas sus academias y su consultoría, Azetanet, sobre la que gira gran parte del caso. El 1 de enero de 2014 Crespo se declaró en concurso de acreedores, lo que provocó que clausurase la Academia Zeta, con sede en la céntrica calle coruñesa de Juan Flórez, y Azetanet y Gecreri, situadas en el polígono de A Grela, todas ellas relacionadas con la formación.
La Consellería de Traballo e Benestar, dirigida por Beatriz Mato, que concedió, entre 2008 y 2012, 15 millones de euros en ayudas a entidades relacionadas con la operación Zeta, publicó esta semana en el Diario Oficial de Galicia la resolución para dar de baja a la Academia Zeta del Registro de Centros y Entidades de Formación para el Empleo. La empresa ya no podrá optar a ser adjudicataria de subvenciones. La Xunta alegó que la eliminación se debe a que incumple los requisitos de la normativa sobre academias aprobada hace dos años. Crespo señaló ayer que no recurrirá la resolución, ya que la academia está cerrada.
