Cuando el ministro de Economía avanzó hace poco más de una semana la intención del FROB de llevar a la Fiscalía una nueva remesa de operaciones "sospechosas" en las entidades financieras con ayudas públicas él mismo destacó que el estudio de la veintena de casos estaba "muy avanzado" y que el envío era cuestión "de días". Luis de Guindos salía así al paso de la polvareda levantada por enésima vez alrededor de las nacionalizadas, con el estallido de la polémica de las tarjetas black de Caja Madrid y Bankia. Un día después de la toma de declaración a Miguel Blesa y Rodrigo Rato como supuestos responsables, el organismo tutelado por el Gobierno y el Banco de España confirmaba el anuncio del ministro. Son 23 operaciones que, directamente, tilda de "irregulares", de las que siete están vinculadas a las antiguas entidades de ahorro gallegas, "realizadas en su mayoría en el período comprendido entre 2005 y 2008". A la espera de que pueda conocerse en algún momento los detalles y cuáles pertenecen a Caixa Galicia y a Caixanova, ésta es la primera ocasión en la que se indagará en los tribunales la gestión de José Luis Méndez, el ex director general de la entidad coruñesa hasta septiembre de 2010. Julio Fernández Gayoso, máximo responsable de Caixanova, ya está imputado por las indemnizaciones millonarias.

Lo que sí se conoce son los "perjuicios económicos" que se "estiman" en función de los informes forensic -estudios a fondo ante la posibilidad de hallar un delito- a los que fueron sometidas estas operaciones. Son, asegura el FROB, 600 millones de euros. Hay otras 16 operaciones vinculadas a CatalunyaBanc, fruto de la fusión de Caixa Catalunya, Tarragona y Manresa, por valor de 900 millones de euros. El quebranto total identificado asciende, por lo tanto, a unos 1.500 millones de euros.

A diferencia del resto de ocasiones en las que puso en manos de la Fiscalía operaciones con visos de ilegalidad en los años previos a su entrada como accionista mayoritario en el capital de las entidades, el FROB envió esta vez una comunicación oficial sobre la decisión de su comisión rectora, donde se especifican tanto el número de expedientes como la cuantía del impacto patrimonial en las cajas afectadas. También enumera una larga lista de ejemplos, que coinciden con los movimientos posibles a analizar que planteó en el "protocolo de actuación previo al ejercicio de acciones judiciales" impulsado en mayo del pasado año por su obligación de "velar por el resarcimiento del daño causado por operaciones ejecutadas por antiguos gestores de dichas entidades de una forma no ajustada a las normas que resulten aplicables".

¿Cuáles? El FROB apunta que la "operativa" de los movimientos investigados "se basa fundamentalmente" en operaciones de financiación y refinanciación para la compra de inmuebles y parte del capital o empresas en su totalidad, renegociaciones de préstamos en las que se rebajaron las garantías para cubrir el dinero entregado, cancelación de deudas -a traves de compraventas, daciones en pago o "cualquier otra figura jurídica análoga-, venta de inmuebles adjudicados, operaciones de inversión -"en situaciones precarias desde el punto de vista económico o patrimonial", pone como ejemplo- y "en general, operaciones que han dado lugar a importantes pérdidas para las entidades y representen indicios de irregularidad o no respondan a una finalidad económica lógica".

La comunicación del organismo encargado de la reestructuración financiera no menciona en ningún momento un caso parecido al de las tarjetas en negro de Caja Madrid. El ministro de Economía aseguraba esta semana que no se había detectado este tipo de operativas en las cajas gallegas.

El FROB recuerda una vez más que está personado en 19 causas penales, "en las que se analizan e investigan presuntos delitos relacionados con operaciones financieras o inmobiliarias de entidades de crédito que han recibido apoyo público". "Con ello se busca minimizar, en última instancia, el coste para el contribuyente", defiende, antes de advertir que sigue revisando el resto de los 90 análisis forensic encargados, "tanto de las entidades mencionadas [en referencia a Novacaixagalicia y CatalunyaBanc], como del resto en la que tiene participación en el capital".