Estudiaron Playa América, O Vao, Barra, Rodeira, Cesantes y Cíes, dirigidas por su profesor Alberto García, que cada año forma equipos entre el alumnado para que observen la naturaleza y el entorno que les rodea, desarrollen estudios propios y participen en todas las ferias de ciencia posibles para divulgar sus conclusiones. Hace unos días el alumnado del Alborada (con cuatro equipos en esta edición), acompañado por García, mostró sus trabajos en Exporecerca, la feria de ciencia para estudiantes de Barcelona, en la que el Alborada participa desde hace más de diez años (también en Galiciencia, la homóloga gallega). Las dos alumnas viguesas, con su informe de los arenales olívicos, quedaron de segundas, entre 150 proyectos de toda España en su categoría.

"Ganaron en Exporecerca, en Barcelona, y como premio viajarán en noviembre a la Feria de la Ciencia en Brasil, están muy emocionadas; es la recompensa por el trabajo realizado", comenta el profesor Alberto. Este estudio, a mayores de asignaturas y temarios oficiales, requiere "tiempo, dedicación y esfuerzo", según García: "pero es como más aprenden, los conceptos teóricos se convierten en práctica y los comprenden mejor, vale mucho la pena, claro". Fue casi un año de estudio, "aprovechando algún que otro mediodía para ir a buscar muestras a la playa, dos tardes a la semana de laboratorio y les ayudaron dos profesores de la Universidad de Vigo, de la Facultad de Biología; las alumnas utilizaron sus aparatos, necesarios para terminar el estudio", añade García.

Alumnos de 5º y 6º de Primaria, entre 10 y 11 años, son capaces de entender la relación entre las matemáticas, la geometría, la pintura y la escultura tras un taller sobre arquitectura. Primero estudian a autores como Kandinsky o Mondrian en clase, cuyas pinturas invitan a reflexionar sobre formas geométricas, composiciones y colores. Después viene la jornada con una profesora y un experto en arquitectura para realizar sus propias obras.

"Empezamos analizando con el alumnado vistas aéreas, de paisajes, para inspirarnos en la topografía. Al mismo tiempo se van vinculando las formas con la geometría. A partir de ahí el alumnado ha de construir su propio cuadro y en él deben diferenciarse formas y volumen", comenta Irita, una de las profesoras involucradas en el proyecto 'Un artista en el aula'. Junto a Pancho, arquitecto, se centran en talleres sobre diseño.

"La experiencia en el centro de Tui ha sido enriquecedora; creo que se lo pasaron bien, al componer ellos mismos con cartón, corcho y poliespán las figuras geométricas para la composición artística", comenta Irita. El reto era introducir en la obra tres formas geométricas distintas y también tenía que haber paralelas y perpendiculares, según cuentan los profesores. "Lo lograron sí, comprobamos que la parte audiovisual les ayuda luego a relacionar conceptos de la asignatura de matemáticas con la propia pintura", añade Irita.

El Centro de Educación Infantil y Primaria (CEIP) Rebordáns de Tui es uno de los diez colegios que participan en el proyecto 'Un artista en la escuela' que organiza la Fundación Barrié. Son autores de diversas materias, desde arquitectura, hasta danza, teatro, música, audiovisuales, arte o diseño, los que pasan una jornada con alumnos de determinados cursos (que previamente se preparan en clase para cada uno de los talleres) para estudiar conceptos artísticos y vincularlos con asignaturas. "Es un modo de introducir las artes en clase y aprender de manera transversal y multidisciplinar", indican los docentes.