Galicia es la comunidad, y con diferencia, con mayor presencia de población en el extranjero. Según los últimos datos del INE -a 1 de enero de 2014-, un total de 479.558 gallegos viven actualmente en al diáspora, lo que supone nada menos que el 23,3% de todos los españoles que residen en el exterior (2,058 millones). Desde que el Instituto Nacional de Estadística comenzó a elaborar este padrón, en el año 2009, la cifra no ha parado de incrementarse, ya que ese año solo estaban inscritos como residentes en otros países poco más de 1,4 millones de personas. En el último ejercicio creció en un 6,6%.

En esta evolución, Galicia se sitúa en cabeza. Si en 2009 tenía 383.599 habitantes repartidos por medio mundo, ahora tiene casi medio millón. Le sigue Madrid, con 292.958, Andalucía (236.013), Cataluña (221.444) y Castilla y León (153.088).

El país preferido por los gallegos en el exterior es Argentina, donde viven 163.227. Tras ella, ya a una considerable distancia, figuran Venezuela (46.617), Brasil (44.809), Uruguay (40.569), Suiza (38.827) y Cuba (33.222).

El INE revela además cuántos gallegos se inscribieron el pasado año en el extranjero. Y la cifra resulta muy elevada: nada menos que 22.329. Pero esto no quiere decir que sea el número de personas que tuvieron que emigrar, ya que la estadística recoge también las nacionalizaciones y los casos en que una misma persona cambió de país en el mismo año. Pero hay un dato revelador, y es que de esos 22.329 solo 4.439 de ellos han nacido en la comunidad gallega. El resto, casi 18.000, lo hicieron en otros países. Por lo que los emigrantes reales serían poco más de 4.000, si bien el propio INE no entra en detalles y solo registra las personas que, teniendo la nacionalidad española, han notificado que viven en otro país.

No obstante, la Xunta sí quiso enfatizar que los 22.329 nuevos gallegos inscritos en el extranjero en 2013 "no se pueden identificar en ningún caso con emigrantes, puesto que en su inmensa mayoría nunca residieron en Galicia". Para reforzar su argumento, el Gobierno autonómico echa mano del dato de los 18.000 gallegos nacidos fuera de España.

¿Por qué se produce entonces este incremento? Por dos fenómenos que discurren en paralelo. La adquisición de la nacionalidad española derivada de la Ley de Memoria Histórica -que obliga a inscribirse en una provincia española- y la vuelta a sus países de origen de los nacionalizados que vivieron temporalmente en Galicia. Solo de esta forma, asegura la Xunta, se pueden entender datos "llamativos" como que en un año se registraran 4.275 altas en Cuba -de los que solo 13 nacieron en Galicia-, 5.501 en Argentina o 1.924 en Venezuela.

También hay otra lectura. Y es que estas personas completan el proceso de nacionalización para así tener las puertas abiertas para entrar en cualquier país de la Unión Europea en caso de decidan buscar fortuna fuera de sus países de origen.

Más de la mitad de los residentes en el extranjero nació en su actual país de residencia, en América la mayoría, mientras que el 34,2% lo hizo en España y el resto en otros países, según los datos del INE. El 63% del padrón de residentes en el extranjero tiene fijado su lugar para vivir en América, por un tercio en Europa y un 3 por ciento en el resto del mundo.