El suministro eléctrico ha sido restablecido para los miles de gallegos que se han visto afectados en las últimas horas por los cortes de luz producidos por el temporal provocado por la borrasca 'Qumaira', que ha azotado a la comunidad.
Tal y como han precisado fuentes de Fenosa a Europa Press, a lo largo de la noche de este jueves se han reparado todas las averías --la mayoría causadas por la caída de árboles, ramas y cortezas sobre las líneas y los tendidos eléctricos--, con lo que se ha recuperado el suministro eléctrico de todos los clientes.
Dirk y Najda azotaron Galicia desde el pasado diciembre, Petra el martes, ayer lo hizo Qumaira y hoy le toca el turno a Ruth, que llega hoy de madrugada al mar y se sentirá a partir de las seis de la tarde en tierra con vientos superiores a 100 km/h. Esta procesión de borrascas seguirá afectando a la comunidad en los próximos días. El temporal de viento y lluvia dejó ayer sin luz a miles de gallegos debido a las caídas de árboles que afectaron a los tendidos eléctricos. La avería más grave se produjo en la parroquia de Chandebrito (Nigrán) y afectó a 1.500 usuarios de Fenosa de la localidad y también de Gondomar. Sanxenxo y Vigo fueron otras localidades pontevedresas perjudicadas por los cortes, con 380 y 190 casos respectivamente. Otros 3.000 vecinos de Oia y O Rosal estuvieron sin luz por otra avería. En total, 20.000 personas se quedaron ayer sin luz en algún momento en Galicia, explicó el delegado de Gas Natura Fenosa en la comunidad, Juan José Picón, en la Radio Galega.
La compañía atendió ayer más de 140 incidencias en las líneas eléctricas, una situación que a última hora de la tarde aún afectaba a 1.500 usuarios que carecían de suministro. 414 trabajadores hicieron frente a las averías.
El temporal se hizo notar también en muchos colegios gallegos, y como medida preventiva para hoy se han suspendido las actividades previstas para celebrarse esta tarde en el exterior de las instalaciones de los centros de A Coruña y la Mariña lucense. Más de una docena de centros sufrieron ayer desperfectos debido a levantamientos de cubiertas por el fuerte viento. La provincia de Pontevedra fue la más perjudicada con desperfectos en centros de Vilanova de Arousa, en el que el levantamiento de la cubierta dejó sin clase a 106 escolares, Pontevedra,Poio,Vilagarcía,Gondomar, Vigo y Baiona. La Xunta determinará la próxima semana las obras de emergencias.
Qumaira pasó por Galicia con rachas de viento que llegaron a los 150 km/h en Cedeira (A Coruña) y 144 km/'h en Oia (Pontevedra). El primer tren de la mañana entre Santiago y Vigo se encontró con un árbol a su paso entre Pontecesures y Catoira, si bien el impacto no causó daños personales. Responsables de Renfe confirmaron que el convoy pudo reanudar la marcha tras apartar el tronco pero añadieron que el impacto sí causó daños en la parte frontal y obligó a limitar la velocidad en la zona.
El temporal de ayer obligó a la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) a elevar la alerta a nivel rojo por olas de hasta ocho metros. La alerta por viento y oleaje impidió un día más que la flota gallega saliese a faenar y la práctica totalidad de las cofradías mantuvieron sus barcos amarrados en los puertos. La situación fue un poco mejor en Lugo y permitió salir a la flota de arrastre de Burela y a la de bajura de Celeiro.
En la comarca del Val Miñor, cayeron decenas de árboles, causando cortes intermitentes de suministro en Nigrán y Gondomar. En este último municipio, murieron dos ovejas aplastadas por uno de ellos, mientras que otro destrozó una marquesina de la parada de autobús de Guntín (Borreiros).El fuerte oleaje causó nuevos daños al paseo marítimo de Panxón, en Nigrán, mientras que el río Miñor se mantuvo desbordado en el centro urbano gondomareño.
La espuma tiñe otra vez A Guarda - Un manto blanco, que "parece nata", volvió a teñir ayer la costa de A Guarda. La espuma es el resultado de las burbujas de aire que forma el agua al chocar con fuerza contra las rocas una y otra vez.
