Adif colocó ayer jueves una baliza ASFA en el punto kilométrico 79-cinco antes del lugar del accidente del Alvia- y un cartelón que limita la velocidad a 160 kilómetros por hora. Además, en el kilómetro 81 implantó otra baliza y un panel que restringe la velocidad a 30km/h y que está protegida por una anterior que modera la velocidad a un máximo de 60 kilómetros por hora.

Se trata de las primeras medidas tomadas por el ente público que preside Gonzalo Ferre tras el accidente en Santiago el pasado 24 de julio, que costó la vida a 79 personas. El ente prevé extenderlas a todos los tramos en los que se produzca una transición de una de alta velocidad a otra convencional.

Estas cautelas son fruto de la revisión de todos los protocolos de seguridad que Adif puso en marcha tras el accidente de Santiago. El administrador ferroviario dio instrucciones a sus técnicos para revisar todos aquellos tramos de red que presenten condiciones parecidas a las del siniestro, en especial las zonas que suponen una integración en núcleos urbanos.

Fomento indicó que el presidente de Adif informará sobre el avance de estas medidas en su comparecencia en el Congreso de los Diputados programada para el jueves 8 de agosto.