La directora general de Tráfico, María Seguí, invitó ayer a los grupos parlamentarios a que creen una ponencia en el Congreso para debatir los pros y los contras del uso obligatorio del casco en ciudad por parte de los ciclistas.

Seguí quiso dejar claro que la propuesta de la DGT de hacer del uso del casco una obligación está justificada ante el incremento del número de heridos entre los usuarios de la bicicleta. Aunque el uso de la bicicleta apenas representa un 2% de los 48.000 millones de desplazamientos que se realizan al año en España en todos los medios de transporte, incluidos los de a pie, Seguí aludió a las cifras de ciclistas heridos, que han aumentado y que, según las previsiones, lo seguirán haciendo.

"Toda la ciencia ratifica el elevado índice de protección de las lesiones craneales" que supone el uso del casco, destacó Seguí, quien recordó que de los 3.767 ciclistas heridos graves en el año 2010, 622 sufrieron un traumatismo craneoencefálico severo y sólo 29 no tuvieron pérdida de conocimiento.