Coincidiendo con la presentación de los resultados, la Audiencia Nacional revisaba los recursos al cuarto ERE de NCG por los sindicatos que se desmarcaron del acuerdo. CIG, Asca y CGT. Las tres formaciones denuncian la falta de información desde el banco durante el proceso, que consideran carente de legalidad porque realmente no existió una negociación real. De hecho, fuentes de la CIG aseguran que durante la vista quedó probado que el número de trabajadores que se van a quedar tras el expediente estaba marcado desde antes incluso de su presentación. En concreto, el plan completo de reestructuración firmado con Bruselas y que consta, según las mismas fuentes, en el proceso, fija una plantilla de 3.334 personas a cambio del préstamo europeo.

Otras fuentes sostienen que los asesores legales de Novagalicia, el bufete Sagardoy, insistió en la Audiencia Nacional en que no existía otra alternativa que el ajuste y un par de veces pusieron el acento que incluso uno de los principales representantes en uno de los sindicatos críticos con el ERE se acogió a él, en un intento de repetir la sentencia del recurso en el caso de la regulación de Paradores, que la Audiencia Nacional ratificó.