El presidente de la Federación de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, se reunió ayer con el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, para pedirle una bajada de impuestos para las pymes y que se reduzca la morosidad de las administraciones.

Tras el encuentro, Amor informó de que el titular de Hacienda se había comprometido a que las administraciones empiecen a pagar a 30 días, dentro del marco legal, gracias al segundo plan de pago a proveedores.

Preguntado por el importe de este segundo plan, el presidente de ATA dijo que la intención del Gobierno es "poner el contador a cero", por lo que "no se ha hablado de ninguna cantidad". Ahora bien, añadió que si los 28.000 millones aportados en la primera versión de plan no lograron poner "el contador a cero", habrá que "poner los recursos que se tengan que poner". Asimismo, Amor pidió a Montoro que, en la medida de lo posible, se cubran todas las facturas pendientes de pago hasta el primer trimestre de 2013 y que exista una vía para poder reclamar aquellas facturas que ayuntamientos y comunidades autónomas no reconocen en sus registros.

Y es que, según señaló, la morosidad está "lastrando" la actividad de miles de autónomos y pymes, que podrían seguir la estela de los 150.000 que han tenido que echar el cierre por este motivo durante la crisis. "Hay que poner coto a la morosidad, porque es uno de los principales focos de destrucción de empleo", ha dicho para añadir a renglón seguido que, de los millones de parados que soporta España actualmente, 800.000 personas han sido víctimas de la morosidad pública.