El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, atribuyó ayer a "un intento de amedrentarle" la difusión de unas fotos suyas de los años noventa con el contrabandista Marcial Dorado, ahora en la cárcel por narcotráfico. Las imágenes fueron publicadas por el diario El País y en ellas se ve al actual jefe del Ejecutivo gallego acompañado de Dorado a bordo de un barco en verano de 1995. Según este diario, el líder del PP y el contrabandista mantuvieron una amistad entre 1995 y 1998 y fruto de esta relación Feijóo fue invitado en varias ocasiones a la casa que este empresario tenía en Baiona, además de compartir excursiones en yate y, al menos dos viajes, a Portugal y Andorra.

El titular de la Xunta, que confirmó la veracidad de las fotos, aclaró, sin embargo, que cuando conoció a Dorado ignoraba sus actividades. "Después me fui enterando de que tenía o fue involucrado en algún caso de contrabando, pero por los datos que yo tenía y por lo que me referían siempre salió inocente. Después en cuanto me enteré de que tenía causas pendientes con la justicia dejé cualquier tipo de relación y de verlo", aclaró ayer, en declaraciones a la Radio Galega.

Contacto

Cuando Feijóo conoció al contrabandista tenía 34 años y era el número dos de la Consellería de Sanidade, que dirigía José Manuel Romay Beccaría. El presidente de la Xunta entró en contacto con Marcial Dorado a través de su testaferro, Manuel Cruz López, que trabajaba en la Xunta como chófer, según relata El País. Su amistad se prolongaría hasta unos meses después que el actual líder del PP gallego fuese nombrado director del Insalud y se trasladase a vivir a Madrid.

"Todas las veces que coincidí con esta persona fue por coincidencia con un compañero de trabajo de mi juventud y en un contexto de ocio, nunca en el ámbito de mis responsabilidades laborales como muestran las fotografías", mantuvo ayer el jefe del Ejecutivo gallego quien, conocedor de que las imágenes iban a ser publicadas, emitió un comunicado la pasada madrugada. Feijóo dará más explicaciones hoy en una rueda de prensa que ha convocado junto al portavoz del grupo parlamentario, Pedro Puy.

Marcial Dorado, según la información publicada, había sido ya detenido dos veces antes de entablar amistad con Feijóo. La primera en 1983 en una redada contra el contrabando de tabaco en las Rías Baixas y en 1990 por orden del juez Baltasar Garzón en el marco de la Operación Nécora. Sin embargo, no llegó a ir a juicio por estas investigaciones.

Feijóo recalca, en el comunicado emitido por el grupo parlamentario del PPdeG, que "en el momento en que se tomaron esas fotografías, esta persona no había sido condenada por ninguna de las causas por las que años después lo ha sido".

Fue un tiempo más tarde de terminar su amistad con el presidente de la Xunta cuando Dorado acabó sentenciado a tres años de cárcel por soborno a dos guardias civiles y después en 2003 fue acusado por narcotráfico, delito por el cual ahora está en la cárcel.

El mismo Feijóo reconoció ayer que pudiera parecer "sorprendente" que no tuviera conocimiento previo de que Dorado se dedicaba a actividades ilegales, pero sostuvo, en declaraciones a la Cadena Ser, que "si lo supiese no me iba a dejar fotografiar".

El presidente de la Xunta, que se mostró dispuesto a explicar en el Parlamento su relación con Dorado, recalcó que, en todo caso, actuará en defensa de su honor ante todo aquel que quiera vincularlo "de forma insidiosa con alguna trama o alguna actividad relacionada aunque sea indirectamente con algo ilegal". "Ninguno de los tres jueces que investigaron a esta persona pensó que yo pudiera aportar nada y nunca fui llamado a declarar bajo ningún extremo", añadió.

Presión

La difusión de las imágenes no le pilló por sorpresa. Feijóo cree que las fotos forman parte del material incautado en un registro a Marcial Dorado. "Recibí algún mensaje directo privado e insinuaciones públicas de que esto iba a salir", advirtió.

De hecho, lo atribuye a "algún tipo de presión", aunque no señala a nadie. Según defiende, tiene la "conciencia tranquila". "Después de una larga trayectoria política y cuatro años de presidente, lo único con lo que han creído poder amedrentarme ha sido con el morbo de unas fotos de mi juventud y a través del daño personal", explica.Y advirtió que esto no le frenará en la defensa de los intereses de Galicia y "en seguir diciendo lo que piensa sobre cualquier cuestión".

En respuesta a las críticas de la oposición, la portavoz del PPdeG, Paula Prado, reprochó a PSOE, BNG yAGE que recurran al "amarillismo político. "Pretenden conseguir a través del daño personal, lo que no son capaces mediante la política", denunció.