La conselleira de Sanidade, Rocío Mosquera, avaló ayer la reducción de personal en los centros de salud que atienden a menos de 1.200 personas, dado que se trata de un criterio que figura en "toda la bibliografía" relativa a la gestión de la atención primaria. Sin embargo, la diputada socialista Carmen Acuña la acusó de acometer recortes "con perversidad, allí donde piensan que se notan menos". En este sentido, ante el pleno de la Cámara, denunció que el PP pretende "desmantelar" el rural, en este caso, a través de los servicios sanitarios.

Así lo prueba, dijo, que ya "suprimieron" las guardias de farmacias, las áreas sanitarias y redujeron los hospitales comarcales y los centros de salud, como ha ocurrido en los ourensano de A Veiga, Laza, Muíños y Sarreaus. Mosquera replicó que estos municipios tienen entre 890 y 1.100 vecinos, de modo que avaló la decisión de mantener los centros sólo con un médico de atención primaria y un enfermero.

La conselleira fue más allá al precisar que ya no solo se atienden las necesidades sanitarias de los pacientes a través de los centros de salud, sino también utilizando las nuevas tecnologías.