Cientos de personas han salido a la calle en toda Galicia, pese a las precipitaciones y al frío, en defensa de los servicios públicos y en respuesta a la convocatoria sindical.

En Pontevedra han sido en torno a 200 personas las que se han concentrado frente a la sede de la subdelegación del Gobierno. Bajo una cortina de lluvia continua abundaron los paraguas de los sindicatos, tanto de los mayoritarios como los de funcionarios, especialmente el Csif.

A la concentración asistieron varios cargos del BNG, entre ellos su portavoz nacional, Guillerme Vázquez, que denunció "el intento del PP gobernante tanto en Galicia como en Madrid de ir procediendo claramente a la eliminación del concepto de servicio público que tenemos en este momento".

Vázquez ha protestado porque se quiera "cambiar el modelo de manera drástica y radical" y también porque cada vez se "jibaricen más los servicios públicos para incrementar el negocio privado a su costa".

En ese sentido se ha referido a la sanidad pública, "el único modo de que la población tenga acceso a un servicio de calidad igual para todos", en contraposición a modelos privados como el de EE UU.

Cerca de trescientas personas se han movilizado esta tarde en la ciudad de Ourense contra los "recortes" realizados por el Gobierno en los servicios públicos.

Durante el recorrido, que transcurrió entre la Subdelegación de Gobierno y la delegación territorial de la Xunta, los manifestantes criticaron los continuos "ataques" a los empleados públicos así como a la clase trabajadora.

En declaraciones a Efe, el secretario comarcal de la CIG, Etelvino Blanco, acusó al Gobierno central de "utilizar" a los empleados públicos como "chivos expiatorios" por culpa de la crisis, que está afectando negativamente a sectores como la hostelería y el pequeño comercio.

"La repercusión en la provincia de Ourense está siendo enorme", especialmente por el descenso de las ventas y cierre de empresas, debido a medidas como la supresión de la paga extraordinaria.

Ante esta situación, la secretaria general de CCOO, Ana Barrios, ha advertido de que tanto empleados públicos como trabajadores se seguirán movilizando hasta que no muden estas políticas del Gobierno.

La queja ha sido unánime en otras ciudades, como Vigo, A Coruña y Santiago de Compostela.