La reducción del presupuesto para 2013 por la pérdida de ingresos del Estado y de la Unión Europea, así como razones organizativas, han forzado al presidente de la Diputación, Manuel Baltar, a iniciar un Expediente de Despido Colectivo (EDC) que afectará a 32 de los 45 empleados laborales con contrato indefinido. Con esta medida, "muy dolorosa" según Baltar, la institución provincial se convierte en la primera diputación española que acomete una regulación de empleo desde que el Gobierno abrió las puertas a los ERE en los entes públicos y administraciones con más de 300 trabajadores a través del decreto del pasado 29 de octubre. La medida será efectiva el 1 de febrero.

El grupo de gobierno en la Diputación había descartado "radicalmente" esta posibilidad desde que Baltar hijo ocupó el puesto de su padre en el sillón de mando el pasado 6 de febrero, pero en las últimas semanas la amenaza del despido colectivo había generado inquietud entre la plantilla. El primer avance lo hizo público el presidente el pasado viernes cuando a preguntas del BNG en el pleno de la corporación no pudo garantizar que no habría un ERE en la Diputación. Al día siguiente, dio una nueva pista al presentar el presupuesto provincial para 2013 en el que se recoge una caída de 1,3 millones de euros en el capítulo correspondiente a los gastos de personal. Finalmente, ayer lo hizo oficial presentado la nueva Relación de Puestos de Trabajo (RPT) y el Plan de Ordenación de Recursos Humanos para 2013.

El primero contempla la amortización de 28 plazas vacantes de funcionarios y laborales fijos que no se cubrirán. Tampoco se renovarán las 13 plazas que quedarán libres por jubilación el año próximo, ni las que se sucederán hasta mayo de 2015 cuando finalice el actual mandato. En total serán 39 jubilaciones las que quedarán vacantes y que se podrán amortizar en función de las necesidades. Baltar avisa además de que estas modificaciones "no agotan la necesidad de continuar con el proceso" y que la reordenación de empleo público provincial "se completará progresivamente a lo largo de los próximos ejercicios".

El presidente dijo que la grave situación económica le obliga a tomar esta decisión "muy difícil" pero "firme, coherente y resolutiva". La oposición ha cuestionado reiteradamente la política de contratación masiva de la Diputación durante el largo mandato del expresidente José Luis Baltar, en el que familiares de cargos del PP y afines al partido engordaron la plantilla, especialmente en épocas preelectorales.