La juez que instruye la operación Pokémon, Pilar de Lara, sometió ayer a un interrogatorio de seis horas al alcalde de Lugo, el socialista Xosé Clemente López Orozco. La instructora mantuvo la imputación contra el regidor por los supuestos delitos de cohecho y por tráfico de influencia, pero lo dejó en libertad sin fianza y sin ninguna otra medida cautelar, al contrario de cuando llamó a declarar al ya exalcalde de Ourense Francisco Rodríguez, al que impuso una fianza de 6.000 euros.
A la salida de los juzgados, a las once de la noche, Orozco se confesó "muy tranquilo" y visto que la juez no le impuso fianza alguna, subrayó que "hizo bien" en no dimitir como regidor, aunque esta actitud le valiera la ruptura con sus socios de gobierno, del BNG. "Os dije que aquella fuerza interior que tenía estos días hoy me ha salido redoblada y dejé claro muchas posiciones que espero que sean estudiadas y tenidas en cuenta por la señora juez y se tome una determinación sobre mí. El alcalde de Lugo es inocente", dijo el regidor.
"Me siento como esa losa, que algunos pusieron encima de mí y hoy se ha disipado, porque poder contestar a todo lo que se me ha preguntado, contestando con la verdad, quedo a gusto y aliviado, muy aliviado", añadió.
Su abogado, Gregorio Arroyo, anunció que la próxima semana se pedirá el "sobreseimiento" de la causa. Sobre la declaración se limitó a señalar que el alcalde había "desmentido una por una todas las supuestas acusaciones por cohecho y tráfico de influencias".
La operación Pokémon, que provocó los ceses de los alcaldes de Ourense (PSOE) y de Boqueixón (PP), investiga presuntas irregularidades cometidas en los contratos de servicios municipales a empresas privadas en varias ciudades gallegas.
La tranquilidad de la que hizo gala al abandonar los juzgados también la mostró cuando se presentó allí a las cinco de la tarde. Confesó que se encontraba "muy bien" y con "ánimo" de responder a todas las preguntas que le formulara Pilar de Lara para que "se conozca la verdad". "Vengo a responder y a hacer este acto constitucional en mi deber de colaborar con la Justicia y esperando que concluya cuanto antes", manifestó cuando se presentó en los juzgados, acompañado por su abogado, seis ediles y el secretario de Organización del PSOE de Lugo, Juan Carlos González.
El presidente del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo, defendió ayer que no se puede establecer una regla general para la dimisión de cargos políticos en caso de imputación, sino que hay que analizar cada caso antes de tomar una decisión en función de la gravedad. "Hay imputaciones sobre determinados asuntos que requieren una decisión por parte del partido al que pertenece el cargo y, en otras, es necesaria más información", dijo. En esta línea añadió que en su partido hay imputados que sí dimitieron , como Pablo Cobián, y otros que se mantienen en el cargo, como los alcaldes populares de Fisterra y Mazaricos, imputados en el marco de la operación Orquesta.
